¡Descarga Agentes endogenos y exogenos y más Resúmenes en PDF de Fisiopatología solo en Docsity! Cuadro comparativo entre acción de agentes físicos químicos y biológicos Agentes Físicos Agentes Químicos Agentes Biológicos Los efectos de los agentes físicos se deben a un intercambio de energía entre el individuo y el ambiente a una velocidad y potencial mayor que la que el organismo puede soportar, lo que puede producir una enfermedad profesional. Los agentes químicos son agentes ambientales presentes en el aire, que ingresan al organismo por las vías respiratoria, cutánea o digestiva, que pueden generar una enfermedad profesional. Los agentes biológicos consisten en la presencia de un organismo o la sustancia derivada de un organismo, que plantea una amenaza a la salud humana. Son aquellos que causan enfermedades comunes, pero si su contagio se produce en el lugar de trabajo constituye una enfermedad profesional. La semejanza que existe entre estos agentes físicos, químicos y biológicos son: Los vamos a encontrar en el ambiente Van a tener una interacción con el individuo el cual les va a causar una enfermedad Pueden causar diferentes tipos de enfermedades dependiendo que agente y a qué zona del organismo afecta. Principales agentes ambientales en el daño celular, tejidos y órganos En relación con las características de los contaminantes, su acción sobre los diferentes sistemas biológicos depende de su naturaleza fisicoquímica, de su concentración en un tiempo determinado y del tiempo que los individuos están expuestos a estos contaminantes, trátese de seres humanos o de animales y plantas. No obstante que existen diferentes tipos de elementos contaminantes en la atmósfera, los que con mayor frecuencia y más intensidad repercuten sobre la salud de la población son los clasificados como de naturaleza química, como los hidrocarburos aromáticos (bencenos, toluenos, xilenos, pirenos, etcétera) y las partículas suspendidas pequeñas, como las de carbón y otro tipo de compuestos derivados de la combustión y la quema de materiales orgánicos e inorgánicos. Los hidrocarburos aromáticos, que en general son liposolubles, es decir, que se disuelven en medios grasos, al ser incorporados al organismo por cualquier vía, ya sea cutánea, conjuntival, respiratoria o digestiva, pasan libremente por las membranas de las células del tejido adiposo, donde se almacenan y donde pueden permanecer por largo tiempo e irse liberando de manera paulatina. Una vez que entran a las células sin dificultad, y dependiendo de su estructura química, pueden actuar sobre diferentes sistemas bioquímicos y moleculares del citoplasma celular o del núcleo, e interferir así con el buen funcionamiento de las diferentes vías de señalización intracelular. Cuando afectan la estructura química de los elementos relacionados con la fabricación de proteínas, y específicamente a nivel de los genes, pueden producir mutaciones y dar lugar a procesos patológicos con diferentes grados de severidad, dependiendo de varios factores. El ozono Tiene una doble acción sobre la población humana. Cuando se encuentra integrado a la atmósfera, en las capas elevadas, constituye una barrera de defensa a los rayos ultravioleta de la luz solar y de esa manera evita que estos rayos incidan sobre las células de la piel del ser humano y sobre otros sistemas biológicos, evitando así la formación de lesiones, algunas de tipo inflamatorio, otras de tipo degenerativo y otras, las más importantes, de tipo tumoral, algunas de ellas cancerosas. Por otro lado, el ozono resultante de la emisión de productos de la combustión y de la actividad industrial, al ponerse en contacto con las células y tejidos del organismo humano contribuye a la producción de radicales libres y otros compuestos reactivos de oxígeno que ocasionan un estado de estrés oxidativo y lesionan así a los diferentes órganos, aparatos y sistemas. Dependiendo de la magnitud de la lesión, el tiempo y grado de exposición, así como la capacidad de respuesta y de defensa y resistencia de los tejidos afectados, las alteraciones celulares, tisulares y orgánicas variarán y se manifestarán en forma de procesos inflamatorios, degenerativos, alteraciones del crecimiento y desarrollo, y en algunas ocasiones se llegará a la producción de tumores, tanto benignos como malignos. Las radiaciones ionizantes Como su nombre indica, tienen la capacidad de producir ionizaciones en los átomos con los que interaccionan debido a su alta energía. Así, estas radiaciones pueden alterar las estructuras químicas de las moléculas que forman las células de nuestro organismo. Si la molécula alterada es importante para el funcionamiento de la célula, como es el caso del