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Buero Vallejo. La Fundación, Resúmenes de Lengua y Literatura

Apuntes de literatura sobre la obra de teatro de la Fundación, de Buero Vallejo. Son cogidos de internet y posteriormente modificados, subrayados y resumidos.

Tipo: Resúmenes

2021/2022

Subido el 29/03/2022

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¡Descarga Buero Vallejo. La Fundación y más Resúmenes en PDF de Lengua y Literatura solo en Docsity! BUERO VALLEJO: La Fundación. La Fundación se estrenó en Madrid en 1974 y está considerada una de las grandes creaciones de Buero. La obra se presenta como una fábula en dos partes y, como si de una fábula se tratara, presenta al espectador el eterno problema de la realidad y la ficción, ficción producida por el rechazo del mundo, en este caso a través del trastorno mental. El enfrentamiento entre realidad y ficción y la reducción paulatina de esta en beneficio de la verdad, es la clave formal bajo la que se desarrolla este drama. 1.- Argumento El argumento de la obra es, en síntesis, el siguiente: Tomás es un preso político condenado a muerte por un régimen totalitario y comparte celda con cuatro compañeros; todos van a ser ejecutados. Tomás fue detenido mientras repartía propaganda, delató a los miembros de su organización cuando lo torturaban y ahora comparte prisión con ellos. Abrumado por el remordimiento, quiso suicidarse, pero Asel, uno de sus compañeros, lo evitó. Ante esta situación, su mente debilitada ha caído en una esquizofrenia que lo protege de la realidad. En su alucinación cree residir en una Fundación en la que él, sus amigos y su novia están becados para desarrollar sus investigaciones. También se puede construir el argumento siguiendo el hilo del desarrollo dramático, es decir, proceder cuadro por cuadro y acto por acto: La acción transcurre en una habitación en la que conviven seis individuos de brillante trayectoria profesional: Tomás, Asel, Tulio, Max, Lino y un hombre sin nombre que está enfermo. Estos personajes se encuentran en una institución llamada La Fundación en la que desarrollan distintos proyectos de investigación. Allí viven cómodamente, es un lugar con buenas vistas y un encargado y su ayudante se ocupan de todos los pormenores de su vida diaria. Esto es al menos lo que cree Tomás, quien abre la obra dialogando con su novia, bióloga que trabaja en un laboratorio cercano. Pronto vemos que entre los personajes hay una relación tirante, cuyas claves desconocemos por el momento. También parece que Tomás está siendo víctima de una conspiración por parte de sus compañeros, y al mismo tiempo su conducta resulta extraña para los demás. Cada vez es más evidente que algo raro sucede: al enfermo no le dan nada de comer desde hace días, hay un constante mal olor, se producen extraños cambios de los objetos de la habitación y el encargado tiene la costumbre de cerrarles la puerta con llave todas las tardes. La primera parte termina cuando el encargado descubre que el enfermo lleva muerto varios días –de ahí el olor pestilente- y él y sus ayudantes se llevan el cadáver, profiriendo amenazas contra los demás presos. En la segunda parte se va desvelando poco a poco el enigma: los seis hombres son presos políticos condenados a la pena de muerte. Tomás delató a sus compañeros tras ser torturados y luego intentó suicidarse; al impedírselo Asel , enloqueció. Así, convirtió mentalmente la celda en una lujosa habitación, imaginó encuentros furtivos con su novia Berta, etc. Pero, paulatinamente, a medida que Tomás se va dando cuenta de la verdad, la habitación se va transformando en lo que es, una celda: desaparecen objetos como los libros, el teléfono, el frigorífico, y por la ventana sólo se ven rejas y otras celdas. El lector comienza a comprender los recelos y las palabras en clave de los otros protagonistas, quienes desconfiaban de Tomás y no querían revelarle de golpe su locura. En desarrollo de los acontecimientos en esta segunda parte, cada vez es más obvio que hay un traidor entre ellos y las sospechas aumentan cuando trasladan a Tulio para ejecutarlo. Todos piensan en Tomás, quien todavía no se ha recuperado de su locura; pero, cuando ésta desaparece del todo, Tomás, Asel y Lino logran reunir varias pruebas que acusan a Max. A pesar de que Tomás y Asel también habían traicionado a sus compañeros por culpa de las torturas y los castigos físicos, no comprenden que Max los haya descubierto sólo por unas pocas mejoras en el trato carcelario. Cuando el carcelero vuelve a buscar a Asel para interrogarle, este se suicida porque sabe que no aguantará el interrogatorio. Aprovechando el momento de caos, Lino asesina a Max lanzándolo al vacío. Tomás finge que vuelve a estar loco para salvar su vida y poder culminar el plan de huida. La obra termina cuando los dos prisioneros son llevados de allí a un destino que no sabemos si será la ejecución o la celda de castigo. Todos estos aspectos del argumento son casi desconocidos para el público hasta muy cerca del final. La trama de la obra sigue una andadura diferente: la acción dramática transcurre en la celda de la cárcel, en la que los compañeros de Tomás, dirigidos por Asel, están tratando de conseguir su vuelta a la razón, aunque esto también se ignore durante mucho tiempo. 2.- Temas Toda la obra de Buero Vallejo constituye un teatro comprometido que no se conforma con entretener al espectador, sino que cuestiona la realidad, plantea problemas y expone soluciones. La Fundación es una obra en la que podemos distinguir varios temas que se complementan y apuntan a un compromiso ético con la existencia humana. 2.1.- Dicotomía realidad-ficción Define Buero la obra como fábula, término asociado a un significado de historia inventada, por oposición a historia real; de esta manera, Buero subraya así el carácter simbólico y atemporal, evitando o suavizando posibles identificaciones con la situación española del momento, pero al presentar la obra como una “fábula en dos partes” también plantea al lector/espectador el eterno problema de la realidad y la ficción, la realidad-de unos y de otros-y la ficción producida por el rechazo del mundo exterior, por la imaginación, por el trastorno mental o por la alucinación. El enfrentamiento entre la realidad y la ficción y la reducción paulatina de esta última en beneficio de la verdad, que va resplandeciendo cada vez con más elementos o “pruebas”, es la clave formal bajo la que se desarrolla este drama. El mundo imaginario de Tomás es el resultado de un enfrentamiento en el que su subconsciente vence al consciente. Tomás interpreta los sucesos y el ambiente. Además, ese entorno es el producto de sus deseos: “Siempre habíamos soñado con un mundo que al fin tenemos”. Y también afirma: “Esto que vemos era el futuro que soñábamos”. Incluso Asel, en un momento de depresión, reconoce el atractivo de un procedimiento (la ficción) cuya visión del mundo ofrece mayor amparo. 2.2.- la violencia y la crueldad. Tomás y sus compañeros son víctimas de la violencia en sus distintas manifestaciones: tortura, hambre, crímenes. El hambre no solo ha causado la muerte por inanición de uno de los presos, sino que ha dado lugar a situaciones indignas por parte de sus hambrientos compañeros: no dan parte de la muerte para apropiarse, durante unos días, del rancho del cadáver. La prueba de que la violencia solo engendra violencia la tenemos en el asesinato de Max a dispuesto para que la tragedia vuelva a empezar. En su mano está escoger y elegir si sigue en la “Fundación” o lucha contra ella en busca de la verdad. En definitiva, el hombre debe dudar de la condición real o ilusoria de todo lo que le rodea; así Buero defiende la misma tesis que en otras muchas obras: la crítica es una necesidad constante del individuo para no caer en el engaño. 3.3.- Las acotaciones resultan un elemento clave en el teatro de Buero pues las suyas son obras Las acotaciones más extensas se encuentran al inicio de cada una de las dos partes de La Fundación. La primera, que abarca más de dos páginas, describe meticulosamente el escenario irreal de la Fundación. Mientras que en las de la segunda parte, especialmente en las del segundo cuadro, se describe nítidamente el escenario de la cárcel. Así pues las acotaciones proporcionan información sobre: •El espacio. La fundación de la 1ª parte se describe como una “vivienda funcional”, dominada por un ventanal desde el que se contempla un “maravilloso paisaje”. A pesar de los electrodomésticos (nevera, televisor, teléfono, una gran lámpara), el mobiliario (estanterías “de finas maderas”, “cinco acogedores silloncitos” y la cama “de línea moderna”), las figuras decorativas, los libros y el menaje exquisito (“finas cristalerías, vajillas, plateados cubiertos, finos manteles”),se aprecian ya algunos elementos discordantes: la sensación de angostura, los muros grises, el suelo de cemento, la taquilla de hierro de pobre aspecto, los seis talegos y los tres bultos recubiertos por arpilleras. En la segunda parte (1ª acotación) desaparecen los elementos asociados al lujo y al confort (los silloncitos, los muebles de finas maderas, el menaje, los electrodomésticos).En la acotación del segundo cuadro desaparece el ventanal y todo el mobiliario. Solo se mantiene la cortina que oculta el retrete. Finalmente, en la de la, se describe la celda con toda su crudeza cuando se eleva la cortina para mostrar el rincón que permanecía oculto, “sucio y costroso de humedad”, donde “no hay más que un retrete”. • La música, ya que la obra comienza y acaba con Guillermo Tell de Rossini. Esta música, al comienzo, crea el ambiente adecuado para la presentación de una alucinación; mientras que al final deja el camino abierto a la esperanza y a la aparición de nuevas situaciones que afectan al espectador. El idílico paisaje que Tomás cree ver a través de la ventana, remarcado por la música de Rossini, se conforma como un símbolo del fututo mejor. • La pintura, que tiene como finalidad sugerir al espectador que algo raro está sucediendo, al producirse hechos inexplicables, incongruentes, que van marcando el proceso de “recuperación”. •La luz, irisada al principio y nítida, hasta llegar a resultar cruda, cuando se descubre la realidad de la cárcel. •La descripción de los personajes y su vestimenta .Tomás es en la primera acotación “un mozo de unos veinticinco años, de alegre semblante, que usa pantalón oscuro y camisa gris” .En cambio, en la acotación que inicia el cuadro II de la segunda parte “Su pantalón gris es idéntico al de los otros; su blusa, por fuera”. •Movimientos, gestos y tono de voz de los actores, en acotaciones, muy breves, intercaladas en medio de los diálogos. Sirvan como ejemplos las del final de la obra: “(Irónico)”, “(Se acerca y le oprime el hombro)”, “(Baja la voz)”, “(Levanta su rostro sonriente)”. 4.- Lugar, tiempo y acción 4.1.- Lugar La obra mantiene unidad de lugar, ya que toda la acción transcurre en un único espacio, aunque este varíe su configuración a lo largo de la obra, al pasar de ser la habitación confortable de una fundación a la celda de una cárcel. Podríamos decir que el escenario está situado en la mente de Tomás o al menos que lo vemos a través de sus ojos, y es un elemento de importancia trascendental en el desarrollo de la historia, ya que el proceso mental que se produce en el personaje al ir acercándose a la realidad se refleja en la transformación paulatina del escenario. Así, los sillones se transformarán en petates, las librerías en paredes desnudas, etc. 4.2.- El tiempo En la obra no hay indicaciones temporales muy precisas, pero los cuatro “cuadros” ( o subpartes) en que se divide transcurren, sin saltos cronológicos internos, en pocos días. En la primera parte, el primer cuadro tiene lugar una mañana poco antes de comer. El cuadro segundo transcurre esa misma tarde. En la segunda parte, el tercer cuadro se desarrolla tres días después, cuando los presos acaban de cenar. En el último cuadro han pasado pocos días, quizá uno sólo. Toda la obra comprende, pues, cuatro días o poco más, tiempo mínimo imprescindible para poder explicar el proceso mental que experimenta Tomás. Este es el tiempo de la acción dramática, pero la historia abarca un tiempo más amplio. A medida que los diferentes elementos del escenario van recuperando su condición carcelaria, es decir, a medida que el protagonista va aproximándose a la realidad, se suministran al espectador los datos referentes al tiempo pasado y que explican la situación presente: la delación de Tomás, la condena a muerte, etc. La Fundación no se encuadra en una época histórica o un lugar determinado, de ahí su universalidad. La intención de Buero Vallejo es hacernos comprender que esta situación se puede dar en cualquier momento de la historia y en cualquier lugar. 4.3.- La acción: La historia es suministrada al espectador con la misma lentitud con que la conoce el protagonista, a medida que este va pasando de la ficción a la realidad, y se complica rápidamente al final al desvelarse los proyectos de fuga y la nueva existencia de un delator que se resuelve fatalmente. Veámoslo con más calma. En general la acción no incluye muchas peripecias, al menos hasta el final, ya que se trata principalmente de un drama de situación. Durante toda la primera parte y casi todo el primer cuadro de la segunda, la acción se centra en el progresivo desmoronamiento del mundo inventado por Tomás y su sustitución por el real. Los únicos instantes de tensión son el descubrimiento del cadáver por los carceleros y la salida de Tulio para su ejecución. Hay otro nudo de acción al que apenas se alude en toda la primera parte, y que toma fuerza en la segunda: el proyecto de evasión a través de un túnel. Así, en la segunda parte, el centro de atención se desdobla y la tensión dramática se concentra en el último cuadro. Este segundo motivo de la acción no puede salir a la luz desde el principio por su mismo carácter de proyecto secreto. Estos dos ejes de acción se entrecruzan y se yuxtaponen, y es Asel el desencadenante de ambas. Él ha sido quien ha impedido el suicidio de Tomás, quien ha ideado el plan de fuga y quien hace averiguaciones hasta descubrir al traidor. La ocultación de la muerte del Hombre es planeada por Asel con una doble intención: por una parte, se puede aumentar la dieta de Tomás, lo que influye mucho en su recuperación; y, por otra, se espera que como consecuencia de este hecho sean llevados a celdas de castigo desde donde puedan intentar la huida. Como el traslado no se produce, comienzan a sospechar que hay un confidente y acaban por descubrir que el soplón es Max. Los instantes de mayor acción e intensidad dramática se producen en el último cuadro, en el que se apresuran los acontecimientos. Esto provoca que los otros tres resulten comparativamente menos dinámicos, lo que, por otra parte, es algo habitual en el teatro. A su vez, cada parte ofrece en su desarrollo pequeños clímax que sirven para mantener el interés: *el enfrentamiento Tulio/Tomás cuando aquel intenta ayudar a poner la mesa pero no hace nada; *el descubrimiento general de la muerte del Hombre. Cada uno de ellos supone una carga de tensión superior a la anterior, para desembocar en el diálogo final de los dos únicos supervivientes, Tomas y Lino, para quienes el sacrificio de Asel -al margen de si podrán luego huir o no- ha supuesto una lección de valor. La incertidumbre que queda sobre el éxito del intento de huida de Tomás y Lino concede a la obra un final abierto y esperanzador. Cuando parecía que todo estaba perdido, la esperanza siempre renace. La obra comienza in medias res, cuando ya han sucedido gran parte de los acontecimientos, la historia de los personajes se halla al término del camino y muy próxima del final, que ya ha llegado para uno de los presos, muerto días antes y cuyo cuerpo permanece en la celda. Y responde a una estructura circular porque empieza y acaba en el mismo espacio escénico. Después de que el hermoso lugar de la Fundación se haya transformado en cárcel, en el último momento vuelve a surgir toda la decoración de la idílica “Fundación” y a escucharse, como al principio, la Pastoral de Rossini. Todo parece indicar que la historia puede iniciarse de nuevo, con otros personajes, y que los espectadores podemos volver a ser testigos de otros engaños semejantes, pero este final no engaña al espectador, que ya ha conocido de la mano de Tomás lo que de verdad se esconde tras esta institución. Se trataría más bien de prevenir al espectador sobre las “fundaciones” que le acechan en la realidad extrateatral, de mantenerlo atento respecto de todo lo que en la sociedad lo limita o enajena, y siempre hay que estar alerta y dispuesto a actuar. 5. Análisis de los personajes Los personajes son presentados a través de otros personajes pero, sobre todo, a través de las acotaciones. La trama de la obra se centra en los cinco condenados a muerte. Clasificación: Protagonista: Tomás Antagonista: Tulio, pero solo parcialmente; en el primer cuadro de la segunda parte abandona el antagonismo, justo cuando Tomás comienza a recuperar la cordura. Personajes principales: además de Tomás, y Tulio, Asel, Lino y Max. Personajes secundarios: el Ayudante, Berta, los dos Camareros, el Encargado y el Hombre. Personajes tipo que abren el cerrado mundo de la celda a un horizonte más amplio de solidaridad humana. Como hemos visto, la acción dramática transcurre en la celda de una cárcel en la que cinco hombres esperan que se cumpla su condena a muerte. Estos cinco condenados son: Asel, un ingeniero; Tulio, un fotógrafo excepcional; Lino, un tornero; Max, un tenedor de libros y contagiadas por la fantasía de Tomás, como si de un proceso de “quijotización” se tratase. Asel afirma dos veces que el paisaje que veía Tomás es verdadero. El propósito de esto es sugerirnos que debemos soñar por ese mundo idílico, que debemos luchar por esa aspiración a algo absoluto e imposible, tal como han hecho siempre los “contemplativos” en las obras de Buero. TULIO es, en un principio, colérico, caracterizado por su intransigencia. Se nos presenta con una primera impresión engañosa, ya que al principio se muestra reacio a seguirle la corriente a Tomás, pero acaba siendo el que en mayor grado se identifica con él al final de la historia, por lo que, dada su humanidad, su ejecución resulta más dolorosa. Antes de que Tomás haya asumido la verdad definitivamente se lo llevan para ejecutarlo, justo en el momento en que fantaseaba con un futuro mejor. b) Activos sin escrúpulos MAX tiene un carácter tranquilo y bromista al principio y defiende a Tomás; pero cuando descubren que hay un delator entre ellos y sospechan todos de Tomás, Max empieza a atacarlo. Al final sabemos que es Max quien traiciona a sus compañeros por un poco de comida y algunas comodidades. Esta traición no queda disculpada en la obra, puesto que es un “vulgar confidente”, en palabras de Asel. No ha sido un momento de debilidad, como la de Tomás o la que en el pasado tuvo Asel, porque Max no ha sido torturado y vende a sus compañeros por poca cosa. Por eso paga su bajeza moral con la muerte a manos de Lino. LINO es al principio el personaje que pasa más desapercibido, por ser un hombre taciturno y aparentemente pasivo. Pero esta actitud cambia completamente cuando informa al resto de la traición de Max y decide asesinarlo. Tomás no lo aprueba, por ser algo cruel e innecesario, y al final de la obra Lino reconoce su error. Un personaje especial es el de BERTA, fruto exclusivo de la alucinación de Tomás, que solo existe en su imaginación (a pesar de ser percibida por el público como un ser tan “real” como Tomás, por lo que es uno de los elementos clave para la “inmersión” del espectador). El verdadero sentido de los diálogos de Tomás y Berta no puede ser entendido por el público hasta el final de la obra. En realidad Berta es un desdoblamiento de la personalidad de Tomás, es un reflejo de su subconsciente, que presenta los primeros atisbos de acercamiento a la realidad. Así Berta dice, por ejemplo, que “aborrece la fundación”, y dice del ratón, al que llama “Tomás” y define como su “novio”, que intentará salvarlo. Este es un símbolo fácilmente explicable: el ratón no es sino Tomás, y su salvación supone su regreso a la realidad y la esperanza de eludir la pena que le espera. preguntas de La Fundación: ● El trasfondo histórico y la intención de la obra. ● Los personajes: caracterización e interrelaciones. ● Los temas morales: traición y supervivencia, muerte y libertad. ● La realidad y la apariencia. ● El efecto de «inmersión» y la escenografía. Mantienen al hombre muerto mintiendo a los guardias de la celda para dos cosas: - Comerse su ración de comida - Provocar que les llevaran a la celda de castigo (en ella tenían un plan para escapar) - Buero Vallejo en su vida fue condenado a muerte pero se le conmutó (perdonó la pena) esto es representado en la obra. - Max es un soplón que le chiva el plan de fuga a los generales franquistas ● El trasfondo histórico y la intención de la obra. Hablar de la España totalitaria del momento (franquista) como estaba y luego decir la intención de la obra respecto a el trasfondo histórico, los cuales por supuesto se relacionan ya que la intención de la obra es criticar los regímenes totalitarios y otros sistemas que engañan a las personas con una falsa verdad que ellos por la ceguera que les produce el régimen las considera como verdadera. La Fundación es una obra en la que podemos distinguir varios temas que se complementan y apuntan a un compromiso ético con la existencia humana. ● Los personajes: caracterización e interrelaciones. Tomás, un joven escritor. Una constante en el teatro de Buero es el enfrentamiento entre personajes activos y contemplativos. Los primeros se caracterizan por su materialismo y su falta de escrúpulos para alcanzar una meta que puede ser el ascenso social o simplemente la supervivencia. Los contemplativos, por el contrario, se definen por el idealismo y la defensa de los principios éticos, pero carecen de voluntad para imponerlos. Permanecen pasivos, aislados de la realidad. Los personajes de La Fundación no encajan completamente en estos dos prototipos porque van evolucionando (especialmente el protagonista). Aun así, haciendo muchas matizaciones podemos clasificarlos así: Personajes contemplativos: TOMÁS es el personaje central de la obra, hasta el punto de que no abandona nunca el escenario y tiene una participación importante en todo momento. El factor clave para la curación de Tomás es el mismo que había provocado su locura: el dolor. Si el sufrimiento causado por la tortura lo había conducido a la delación de sus compañeros, los remordimientos y la locura, ahora el trauma causado por las sucesivas muertes de sus compañeros hará que recobre la lucidez. Los cuatro acontecimientos clave en este proceso evolutivo serán: 1. Descubrir que el hombre que él creía enfermo era, en realidad, un cadáver 2. Descubrir que a TULIO se lo han llevado para ejecutarlo 3. Ver el suicidio de Asel - Personajes con principios éticos TULIO Y ASEL - Personajes sin escrúpulos MAX (al principio no) y LINO (hasta el final de la obra) Berta personaje especial Interrelacionarlos unos con otros Todos están en una celda que le ayudan a superar su esquizofrenia a tomás, … - Temas morales: traición, supervivencia, muerte y libertad Traición: hablar de la diferencia entre la traición de Tomás con la de Max Supervivencia: hablar de el plan que tenían para escapar y de los sueños que tienen por salir de la cárcel Muerte: el miedo que le tienen todos a esta y también hablar del discurso de Asel en la que critica al régimen y a las guerras que las describe que acaban en muertes. También hablar de la muerte del enfermo Libertad: hablar del trato entre Max y los guardias y de la fundación y del plan para salir de la cárcel. - La realidad y la apariencia: Hablar de toda la tónica de la obra y de la crítica que hacía sobre las guerras y los regímenes totalitarios comparándola realidad con la situación que te hacen aparentar. - Efecto de inmersión y escenografía Esto lleva al espectador a preguntarse si como Tomás, o como él mismo hace unos instantes, no estará viviendo en un error, en una “fundación”, tras la que se ocultan otras realidades. Por medio de esta técnica dramática (efecto de inmersión) Buero denuncia lo equívoco de nuestra sociedad y busca la comprensión hacia el delator al que el público llegará a entender y perdonar. Son evidentes las referencias a La vida es sueño de Calderón. Así, cuando empieza la obra vemos la celda como la ve el protagonista, y nuestra primera impresión es que estamos en una fundación y sólo descubriremos la verdad cuando la descubra el protagonista. El espectador no goza en ningún momento de una perspectiva superior a la del protagonista, por lo que participa en la enajenación del personaje sin ser consciente de ello y vive con él el proceso de acercamiento de la locura a la realidad, por lo que ciertos hechos son vistos como incongruencias o absurdos inexplicables para ambos. Esto se conoce como “efecto de inmersión” Podríamos decir que el espectador es “engañado” por el autor que lo hace participar, en cierta medida, de la enajenación del protagonista, ya que el público ve lo que ve Tomás, y sólo descubre la realidad a medida que este la descubre. Escenografía: describir la fundación, la celda y el paso del tiempo en el que se pasa de la fundación a la celda con la progresiva desaparición de los elementos y la aparición de otros. También hablar de la música de Rossini.
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