Contexto Cultural y Filosófico de Platón: Biografía, Obras y Contexto Histórico, Apuntes de Historia de la Filosofía

¡Descarga Contexto Cultural y Filosófico de Platón: Biografía, Obras y Contexto Histórico y más Apuntes en PDF de Historia de la Filosofía solo en Docsity! Contexto cultural de Platón. Platón nace en el seno de una familia aristocrática en la ciudad de Atenas en el año 427 a.C. y muere, a los ochenta años de edad, en el 347 a.C. Entre los hechos más destacables de su vida cabe mencionar los tres viajes a Siracusa, donde trató de poner en práctica sus ideas políticas, que fueron un fracaso. Durante su primer e a Siracusa y debido a diferencias políticas entre el gobernador de la ciudad Dioniso | y el propio Platón, Platón llegó a ser vendido como esclavo y un amigo suyo, que pudo reconocerlo, pagó para liberarlo. Tras el regreso a Atenas de su primer viaje a Siracusa fundó la Academia, cuyo nombre viene por estar cerca del templo dedicado al héroe Academo. Allí, durante los cuarenta años que permaneció en el lugar, escribió la mayor parte de sus obras. Las obras de Platón suelen clasificarse por orden cronológico desde las más tempranas, las obras de juventud, pasando por las obras de madurez, en las que expone las tesis fundamentales de su pensamiento, hasta los diálogos de vejez, en los que Platón hace una revisión crítica de su filosofía. Algunas de sus obras más destacadas son La Apología de Sócrates (juicio y condena de su amigo Sócrates), el Protágoras (sobre si es enseñable la virtud) (de juventud), el Fedón (la inmortalidad del alma) el Banquete (del amor), la República (de los tipos de gobierno y de otros asuntos como gnoseología, metafísica) (de madurez) el Parménides (revisión de su teoría de las ideas), el Teeteto (sobre el conocimiento) y el Sofista (sobre el lenguaje y, en particular, la retórica) (de vejez) Los dos principios fundamentales que caracterizan la democracia ateniense son la isonomía y la isegoría. La isonomía establece la igualdad ante la ley de todos los ciudadanos, sin privilegios ni distinción de ningún tipo. La isegoría se refiere al derecho de todos los ciudadanos a hablar y participar en la Asamblea. La democracia ateniense que Platón conoció era una democracia directa, en la que los ciudadanos decidían acerca de los asuntos públicos por sí mismos, en la asamblea, sin la mediación de representante alguna. Sin embargo, no todos los que vivían en Atenas disfrutaban de la condición de ciudadanos. Los ciudadanos de pleno derecho eran solamente aquellos varones que hubiesen pasado por un periodo de formación militar entre los 18 y los 20 años y fuesen además hijos legítimos de ciudadanos atenienses. Los demás, mujeres, extranjeros y esclavos, no eran ciudadanos. Las instituciones políticas básicas de la democracia ateniense son tres. La Asamblea (Ekklesía) el Consejo de los 500 (Boulé) y los Tribunales de Justicia (Dikastería). La Asamblea tenía como función elaborar leyes y elegir a cargos públicos, El Consejo asumía una función ejecutiva y aplicaba las leyes acordadas en la Asamblea. Los Tribunales de Justicia, por su parte, eran los encargados de solucionar todos los conflictos que se producían en la sociedad, ya fuesen públicos o privados. La Atenas del siglo V a.C. experimentó un desarrollo cultural sin precedentes. Los siglos V y IV fueron el escenario de las obras trágicas de Esquilo (La Orestíada), Sófocles (Edipo rey y Antígona) y Eurípides (Medea). En la comedia destaca Aristófanes, quien hace un retrato cómico de Sócrates en su obra Las Nubes. La obra arquitectónica más señalada del siglo es sin duda el Partenón, de estilo dórico y decorado por el escultor Fidias. Otros grandes escultores de la época de Platón fueron Praxíteles y Policleto, cuya escultura el Doríforo, que significa el portador de la lanza, vino a establecer un canon de belleza cuya proporcionalidad está basada en una altura de siete cabezas. Por último, las figuras más relevantes de la historiografía en la época fueron Jenofonte y Tucídides. Jenofonte, como Platón, fue discípulo de Sócrates y, también como él, escribió una Apología en la que relata cómo fue el juicio a Sócrates. Su obra más reconocida es la Anábasis o expedición de los cien mil, obra histórica en la que relata la expedición militar de Ciro el Joven contra su hermano el Rey Persa Artajerjes || a principios del siglo V a.C. Tucídides, por su parte, narra, desde un punto de vista objetivo, las batallas de la Guerra del Peloponeso entre Atenas y Esparta y la posterior decadencia de Atenas durante el régimen de los treinta tiranos. Contexto filosófico Las tres influencias del pensamiento de Platón son la filosofía presocrática, los sofistas y Sócrates, su maestro. De la filosofía presocrática Platón toma algunas ideas de Anaxágoras, de Heráclito, de Parménides y de Pitágoras. Vamos a analizar las contribuciones filosóficas de cada uno de estos autores. La idea clave que Platón toma de Anaxágoras es la de Nous, una inteligencia ordenadora capaz de discriminar a unos seres de otros. Para Anaxágoras todo está en todo y todo está hecho de todo. De ahí que sea necesaria la intervención de una Mente que, sin mezclarse con las cosas, las separa y distingue. El orden del mundo es posible gracias a ella. Del mismo modo, el Demiurgo de Platón es como un artesano que da forma a la materia. Éste, por compasión, sintió que la materia no debía permanecer errante ni indistinta e, inspirándose en el mundo de las ideas, decidió darle un orden, separando unas cosas de otras, distinguiéndolas, para que en el mundo hubiera todo lo que conocemos (árboles, nubes, ríos) Platón, además, elabora su teoría ontológica como un intento por hacer compatibles las tesis de dos filósofos presocráticos, Heráclito y Parménides. Para Heráclito todo cuanto existe está en perpetuo cambio. Nada permanece. La verdadera realidad es aquella que nunca coincide consigo misma. Por eso se le atribuyen dos citas “No te bañarás dos veces en el mismo río” o “Todo fluye”. La postura de Parménides es precisamente la opuesta: la realidad es invariable, no puede mudar. Del ser, solo puede decirse que es, y del no ser, sólo puede decirse que no es. Si admitiéramos la existencia del cambio, tendríamos que reconocer una contradicción, la de que algo es y no es al mismo tiempo. El propósito de Platón es conciliar ambas tesis afirmando la existencia de un mundo sensible, en el que todo cambia, y la existencia de un mundo inteligible, en el que las ideas permanecen iguales a sí mismas, sin que se vean afectadas por cambio alguno. Otras de las influencias presocráticas más destacables en la formación del pensamiento platónico es la del pitagorismo. Tanto para Platón como para los Pitagóricos el número no es una construcción mental sino una realidad existente per se. Es más, no es que los números sean reales, es más bien que la realidad es numérica. Todo cuanto existe puede explicarse a partir del uno, que traducido geométricamente corresponde al punto, a partir del dos, que corresponde a la línea, a partir del tres, que establece el mínimo necesario para formar una figura plana y a partir del cuatro, que corresponde a los volúmenes. La suma de estos cuatro números, el diez, es el número perfecto. Estas reflexiones llevaron a Platón a ver en las matemáticas una disciplina a través de la cual podemos conocer verdaderamente la realidad y quizás por eso también colocó en la puerta de su Academia “No entre aquí nadie que no sepa geometría”. Por otro lado Platón asumió como propia la tesis pitagórica de la transmigración de las almas. Tanto para Platón como para los pitagóricos el alma “viaja” a