El quinto poder, el documental sobre la película, Ejercicios de Periodismo

¡Descarga El quinto poder, el documental sobre la película y más Ejercicios en PDF de Periodismo solo en Docsity! AINHOA SÁNCHEZ HURTADO “El quinto poder” y la crisis entre el derecho a la información y la revelación de datos Se trata de una película basada en el escándalo de WikiLeaks. Era una organización mediática internacional sin animo de lucro, la cual publicaba informes anónimos y documentos filtrados de interés público, especialmente en relación con la guerras de Irak y de Afganistán. Su fundador fue Julian Assage, quien se basaba en la defensa de la libertad de expresión y los medios. De tal modo, las personas que enviaban la información a WikiLeaks se encontraban en un grave riesgo puesto que, al revelarse cierta información, fueron asesinados. Al tratarse de muchos documentos de distinta índole y de distinto origen, era muy difícil asegurar la veracidad y exactitud de la información que se publicaba. Estas actividades eran consideradas delitos en la mayoría de países. Ahora bien, ¿quién traza los límites de la transparencia y la seguridad? Ahí radica el problema. Desde luego que existe información gubernamental que merece estar ala alcance de los ciudadanos, pero para ello existen las leyes. En el caso de España, se encuentra la Ley 19/2013, de transparencia, acceso a la información pública y buen gobierno. Películas como esta permiten analizar que, a pesar de que paginas web como WikiLeaks son creadas para la libertad de expresión y, aún solo afectando a organizaciones gubernamentales y empresas, no dejan de vulnerarse derechos, como es el del artículo 18 de la CE, el derecho a la intimidad. Ello se ve reflejado cuando se publican documentos con el nombre de personas partícipes. Es cierto, que Julian se apoya en el derecho (aquí en España) del artículo 20 de la CE, solo que se le acaba yendo de las manos el poder, al final se borra la línea de la privacidad de un estado o institución. Por lo tanto, este tipo de páginas web deberían de ser “aceptadas”socialmente, pero con matices. Las leyes regulan nuestros derechos y no podemos ir más allá de la ley por mucho que se pueda pensar que el fin justifica los medios.