Docsity
Docsity

Prepara tus exámenes
Prepara tus exámenes

Prepara tus exámenes y mejora tus resultados gracias a la gran cantidad de recursos disponibles en Docsity


Consigue puntos base para descargar
Consigue puntos base para descargar

Gana puntos ayudando a otros estudiantes o consíguelos activando un Plan Premium


Orientación Universidad
Orientación Universidad

Enfermedad de Graves, Monografías, Ensayos de Inmunología

Enfermedad de graves monografía

Tipo: Monografías, Ensayos

2022/2023

Subido el 02/12/2023

allison-agurto-1
allison-agurto-1 🇵🇪

5 documentos

1 / 8

Toggle sidebar

Documentos relacionados


Vista previa parcial del texto

¡Descarga Enfermedad de Graves y más Monografías, Ensayos en PDF de Inmunología solo en Docsity! UNIVERSIDAD PRIVADA ANTENOR ORREGO FACULTAD DE MEDICINA Y CIENCIAS DE LA SALUD ESCUELA PROFESIONAL DE MEDICINA HUMANA INMUNOLOGÍA PRÁCTICA “INFORME DE SEMANA N°13” DOCENTE: Carmen Silupú INTEGRANTES: - Aguilar Cabeza, Sofía Mariela - Agurto Paiva, Allison Thamara - Aliaga Silva Martha Tatiana - Bayona Chero, Alexander Gastón - Bayona Juarez, Diego - Boggio Cuenca Faride Daniela - Carmen Portocarrero, Nicolle Angélica - Castillo Ojeda Luisabela - Chávez Saldarriaga, Karla NRC: 9820 INTRODUCCIÓN MARCO TEÓRICO 1) DEFINICIÓN La enfermedad actualmente conocida como enfermedad de Graves fue identificada y descrita por tres médicos: Caleb Parry, Robert Graves y Kart von Basedow. Esta afección, denominada Graves-Basedow, se presenta como un enigma clínico esencial, especialmente en áreas con una alta presencia de yodo. Durante el embarazo, las enfermedades tiroideas son comunes, lo que aumenta significativamente la prevalencia de hipertiroidismo en mujeres, siendo de 5 a 10 veces mayor que en hombres. La raíz de esta enfermedad radica en un desequilibrio hormonal tiroideo que provoca la producción excesiva de hormonas tiroideas, dando lugar al hipertiroidismo. La prevalencia anual de la enfermedad es del 3%, con tasas del 0,1-0,2% en hombres y del 1,9-2,7% en mujeres. La enfermedad de Graves-Basedow constituye el 85% de los casos de hipertiroidismo y puede manifestarse en cualquier etapa de la vida, aunque predomina en las décadas tercera y cuarta, afectando más a mujeres que a hombres. La EGB afecta aproximadamente al 0.5% de la población, puede presentarse a cualquier edad, pero su mayor incidencia es entre la 5ta-7ma década de vida con una relación mujer: hombre de 5-10:1. Resumiendo, quedaría una incidencia general de 15-50 por cada 100.000 personas de las cuales son 80 por 100.000 mujeres y de 10 por 100.000 hombres al año. En Japón, donde la ingesta de yodo en la dieta puede ser mucho más alta que en la mayoría de los países, la incidencia puede alcanzar cifras de 200 por 100.000. 2) ETIOLOGÍA Esta afección tiene un origen autoinmune, donde la excesiva producción de hormonas tiroideas se atribuye a la acción de inmunoglobulinas estimulantes del tiroides. Clínicamente, la enfermedad de Graves se caracteriza por la tríada clásica de bocio, tirotoxicosis y exoftalmos, aunque es común encontrar formas incompletas o disociadas de la enfermedad. El 79% de la predisposición al desarrollo de EGB se atribuye a defectos genéticos, pero no por falla de un único gen sino que se considera un patrón complejo de herencia producto de la interacción de múltiples genes. El tipo más común de variabilidad se presenta en los SNPs, en los que se han identificado al menos 7 genes que conllevan a ETAI: HLA-DR (B1, DQA1), CTLA-4, CD 40, PTPN22, CD 25, GEN DE LA TIROGLOBULINA Y GEN DE LA TSHR. Pacientes caucásicos con EGB tienen haplotipo DQA1*’5 y DQB1*02, en población asiática se ha encontrado HLA-DPB1. Por otro lado, se ha encontrado a la arginina en la posición 74 de la cadena HLADRb1 (DRb-Arg74) como el aminoácido DR crítico que confiere la susceptibilidad a la EGB. 5) INMUNO-FISIOPATOLOGÍA No hay una causa precisa, más bien se postula que muchos factores causan la activación inapropiada o activación anormal de las células inmunes con la glándula tiroides . En los ganglios linfáticos, las CPA podrían presentar antígenos similares al TSHR y esto activaría a los linfocitos vírgenes en el ganglio linfático. Estas células T activadas pueden activar consecuentemente a las células B que se convertirán en células plasmáticas y producirá anticuerpos. Estos anticuerpos se conocen como estimulantes del receptor de TSH (O también llamados TSI), ellos van a ser reconocidos por el receptor de TSH presente en las células foliculares de la tiroides causando producción de hormonas tiroideas (función que normalmente cumpliría la hormona TSH). Sin embargo, estos anticuerpos llevarán a una sobreproducción de T3 y T4 causando un efecto supresor constante en la hipófisis y en el hipotálamo por retroalimentación negativa disminuyendo así los niveles de la hormona TSH. En EG, como resultado de coestimulación de los linfocitos infiltrantes vía B7-2 hay predominio de citoquinas como IL-4, IL-5, IL10 que favorecen la inmunidad humoral. Los pacientes con EG producen TRAbs que activan el receptor de TSH y causan hiperplasia e hiperfunción tiroidea. Inmunoglobulina G de pacientes con EG disminuye la expresión de FAS en tirocitos normales. En EG se regulan en forma positiva proteínas antiapoptóticas, incluida Bcl-2. Se induce la expresión de FASL y Trail, que pueden producir la muerte de linfocitos intratiroideos. En EG se encontró mayor concentración de FAS soluble que puede inhibir el sistema FAS-FAS L. Estos autoanticuerpos del Receptor de la hormona estimulante de la tiroides no son muy específicos, lo que quiere decir que usualmente deberían unirse a los TSHR pero hay receptores que pueden ser similares a éste en todo nuestro cuerpo, específicamente en el ojo y en las piernas, causando ciertas manifestaciones clínicas como la oftalmopatía y la dermopatía en la piel. Después de un tiempo hay cambios notables en personas con la enfermedad de graves. Normalmente la glándula tiroides está compuesta por folículos tiroideos que forman coloide que produce las hormonas tiroideas. En la EG las células foliculares se compactan y se estrujan, llegando a convertir en células altas, subsecuentemente, disminuye el coloide. Por último en la EG hay presencia de linfocitos, por tanto hay una infiltración linfocitaria. En el desarrollo de ETA intervienen factores ambientales y hormonales. Estos factores, en individuos genéticamente predispuestos, pueden llevar a disfunción tiroidea. Durante el estrés se activan el eje hipotálamo hipofisario adrenal y el sistema simpático adrenal. Ésto lleva a una elevación sistémica de glucocorticoides y catecolaminas que regulan en forma negativa la secreción de citoquinas Th1 y en forma positiva citoquinas Th2, que resulta en una respuesta dominante tipo Th2, que es la que predomina en EG. Simultáneamente se producen Acs que estimulan, ya no la producción de la tiroxina, sino la hiperplasia e hipertrofia de las células de los acinos y el acúmulo en ellas de coloide. Los estrógenos participan en el desarrollo de la enfermedad, que rara vez ocurre antes de la pubertad, y que como ya se mencionó, afecta más a las mujeres EXÁMENES SEROLÓGICOS REQUERIDOS PARA EL DX DE ENFERMEDAD DE GRAVES 6) TRATAMIENTO - Terapia con yodo radiactivo: Consiste en la ingesta de yodo radioactivo por vía oral. La tiroides necesita yodo para producir hormonas. Entonces, capta el yodo radiactivo hacia el interior de las células tiroideas y con el tiempo, la radiación destruye las células tiroideas hiperactivas. Esto hace que la glándula tiroides reduzca su tamaño y que los síntomas disminuyan de forma progresiva. Esta terapia presenta un efecto secundario que suele ser lebe, el cual es el desarrollo de nuevos síntomas de la oftalmoptía de Graves, por eso no se recomienda esta lotería si el paciente tiene problemas oculares moderados o graves. Otros efectos secundarios pueden incluir sensibilidad en el cuello y un aumento transitorio de las hormonas tiroideas. - Medicamentos antitiroideos: Afectan el uso de yodo por parte de la tiroides, interrumpiendo la producción de hormonas. Algunos medicamentos son el propiltiouracilo y el metimazol, siendo este último la primera opción. Tomar cualquiera de los dos fármacos durante más de un año puede ayudar a obtener mejores resultados a largo plazo. Los medicamentos antitiroideos también se pueden usar antes o después de la terapia con yodo radioactivo, a modo de tratamiento complementario. Los efectos secundarios de ambos medicamentos son erupción cutánea, dolor articular, insuficiencia hepática o disminución en los glóbulos blancos. - Cirugía: Otra opción de tratamiento es extirpar toda o cierta parte de la tiroides (tiroidectomía o tiroidectomía subtotal). Después de la cirugía se suele necesitar un tratamiento que brinde al organismo cantidades normales de hormonas tiroideas. Los riesgos de esta cirugía incluyen el posible daño al nervio que controla las cuerdas vocales y las glándulas paratiroides. - Betabloqueadores: Bloquean el efecto de las hormonas en el organismo pero no inhiben la producción de estas hormonas. Pueden aliviar relativamente rápido los latidos del corazón irregulares, los temblores, la ansiedad o la irritabilidad, la intolerancia al calor, la sudoración, la diarrea y la debilidad muscular. Encontramos los siguientes betabloqueadores: Propranolol (Inderal, InnoPran XL), Atenolol (Tenormin), Metoprolol (Lopressor, Toprol-XL), y Nadolol (Corgard). 7) MECANISMOS DEL TRATAMIENTO Como tratamiento se emplean _ -bloqueantes que corrigen los síntomas relacionados con el aumento del tono -adrenérgico (taquicardia, palpitaciones, temblor, ansiedad) y fármacos para disminuir la síntesis de hormona tiroidea como tionamidas (propiltiouracilo), ablación con radioyodo o cirugía. La enfermedad de Graves es una enfermedad autoinmune que causa hipertiroidismo, es decir, una producción excesiva de hormonas tiroideas. El tratamiento de la enfermedad de Graves tiene como objetivos detener la producción de hormonas tiroideas y bloquear el efecto de las hormonas en el organismo. Entre los tratamientos disponibles, se encuentran los siguientes: ➔ Medicamentos antitiroideos. Son fármacos que inhiben la síntesis de hormonas tiroideas en la glándula tiroides. Los más usados son el metimazol y el propiltiouracilo. Estos medicamentos se toman por vía oral y pueden tener efectos secundarios, como alergias, alteraciones del hígado o disminución de los glóbulos blancos. El tratamiento suele durar entre 12 y 18 meses, y en algunos casos se logra la remisión de la enfermedad. ➔ Betabloqueantes. Son fármacos que bloquean los receptores beta-adrenérgicos, que son los que responden a las hormonas tiroideas y causan síntomas como taquicardia, temblor o ansiedad. Los betabloqueantes no afectan la producción de hormonas tiroideas, sino que alivian los síntomas mientras los medicamentos antitiroideos hacen efecto. Los más usados
Docsity logo



Copyright © 2024 Ladybird Srl - Via Leonardo da Vinci 16, 10126, Torino, Italy - VAT 10816460017 - All rights reserved