¡Descarga ensayo memorias de marco aurelio y más Monografías, Ensayos en PDF de Gestión de Conflictos solo en Docsity! MEMORIAS DE MARCO AURELIO. Meditaciones es una obra que el emperador escribió para sí mismo y la cuál ha devenido una obra cabal de la ética. En ella encontramos los fundamentos del estoicismo con el que el romano coulgaba que sirven de guía para llegar a encontrar la felicidad y la tranquilidad que nos ayudan a vivir bien. Para el emperador, así como para el resto de los estoicos el determinismo es un hecho. Existe un destino para cada uno y es inútil luchar contra él. La vida de cada uno está determinada. Es en esta situación donde la razón individual es la que nos debe guiar para alcanzar la verdadera libertad que consiste en librarse de aquello que no podemos controlar, la razón universal. Lo único que no depende del ente universal es el pensamiento que es libre de decidir de juzgar, etc. Por tanto, la razón individual es la que nos hace ir descubriendo los motivos por los cuales las cosas suceden y es en este conocimiento donde radica la verdadera libertad para los estoicos. El concepto razón universal no implica que el universo razone si no que va implicado en el destino determinado. Los acontecimientos que nos ocurren son debidos a una razón universal. Todo está ya escrito y ocurre para bien. Otro elemento a tener en cuenta es el presente, muy importante. Sólo existe éste, el pasado ya no está y el futuro está escrito, por tanto, no debemos preocuparnos, simplemente vivir. Por otro lado, ser racional es una de las premisas que se sitúan en lo alto de la jerarquía de elementos fundamentales en la corriente estoica. Para los estoicos ser racional significa reflexionar sobre las cosas, hacer las cosas sin pensar en los resultados o en las consecuencias, con una actuación implícitamente sensata. La razón es lo que nos hace libres, autosuficientes y nos otorga la posibilidad de vivir una vida tranquila. Ser sabio no significa apoderar conocimientos sino mediante la razón ser capaz de aprender a vivir esta vida en conjunto con el dolor y sufrimiento que por inercia conviven con nosotros y que son inevitables. La racionalidad brinda la oportunidad de aceptar estas situaciones y convivir con ellas lo mejor posible y así minimizar lo máximo posible el pesar que nos aleja de la felicidad. Al pesar se refiere también Marco Aurelio como a un sentimiento, una sensación, análoga a otras como la somnolencia, el calor exagerado, etc. las cuáles también nos molestan con la misma intensidad que el pesar pero no nos percatamos que son igual de intensas que éste último por tanto ceder ante estas sensaciones que no nos gustan es ceder ante el pesar. La tranquilidad es otro elemento importante en su filosofía. Aceptar los acontecimientos como han sucedido y que forman parte del destino de uno, y dejar de lado los sentimientos encontrados, negativos como las preocupaciones, las frustraciones, etc., para así enderezar el camino hacia una vida tranquila y por tanto feliz. Marco Aurelio además en sus meditaciones nos invita a evitar emociones ya mencionadas, placeres carnales, no indignarse con la maldad, hacer caso omiso de la ignorancia de la gente entre otras muchas cosas; en conclusión, a centrarnos en nuestra propia existencia y vivirla en sintonía con la naturaleza racional del hombre que es la que nos guía. El emperador afirma que de uno mismo no depende su destino como bien ya se ha comentado dado que estamos determinados por un destino insalvable, pero sí depende de nosotros saber vivir bien y encontrar el camino hacia la libertad, así como tener una vida digna, junto con una perfección moral que se puede alcanzar viviendo, según palabras del propio autor “cada día como si fuera el ultimo, sin convulsiones, sin entorpecimientos, sin hipocresías”. De nosotros depende evitar nuestra propia maldad, no la de los demás, pero sí la nuestra. De nosotros depende también nuestra serenidad en la vida. Es en vano preocuparse por las consecuencias de este mundo, la naturaleza universal es la que decide, por tanto la serenidad puede ser adquirida dado que tenemos la certeza del destino. El “bien” es una virtud y la violencia un acto a evitar. Vivir conforme a uno mismo sin tener en cuenta las opiniones del resto de seres humanos, dar favores al igual que recibirlos, pero con la mentalidad que si recibimos un favor y otro lo recibe ya es suficiente.
