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Estudio de la obra de Don Quijote de la Mancha, Resúmenes de Literatura Universal

Analisis de la obra concisamentei por capitulos

Tipo: Resúmenes

2019/2020
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Subido el 12/05/2020

andreu-nunez-hernandez
andreu-nunez-hernandez 🇪🇸

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¡Descarga Estudio de la obra de Don Quijote de la Mancha y más Resúmenes en PDF de Literatura Universal solo en Docsity! DON QUIJOTE DE LA MANCHA – ESTUDIO DE LA OBRA La crítica universal coincide en considerar El ingenioso hidalgo Don Quijote de la Mancha la primera novela moderna. Se entiende como tal aquella obra de ficción, en prosa, extensa y compleja, que se elabora con elementos tomados de la realidad. El novelista trata de darnos a través de la obra su personal visión del mundo en la que se refleja su filosofía vital. La novela moderna llega a Europa en su forma definitiva en el siglo XIX, pero no hubiera sido posible sin los avances del realismo a lo largo de varios siglos. Los grandes novelistas del siglo XIX, especialmente los ingleses, y por supuesto, los españoles, reconocen la deuda que tienen con el Quijote. Al hablar de arte realista entendemos como tal aquel en que su autor logra infundir en el lector una sensación de realidad. Este arte se aplica tanto a seres humanos como a cosas o ideas, pero el realismo español se ha preocupado ante todo del hombre. Don Quijote se nos presenta como un personaje de carne y hueso, de tal manera que su inconfundible personalidad ha pervivido en todos los países a través de los siglos. El Quijote es una novela “itinerante” al igual que los libros de caballerías, pues su acción principal está constituida por tres viajes (o salidas) realizadas por el héroe principal. La trama de la novela consiste en una continua sucesión de episodios organizados alrededor del héroe. La estructura de cada viaje es idéntica: don Quijote sale de su aldea en busca de aventuras y regresa derrotado a ellas. Según avanza la novela –y sobre todo en la segunda parte- el interés de la obra se centra en la relación entre don Quijote y Sancho. De esta manera el diálogo se va convirtiendo en elemento más importante del relato. La distribución de las tres salidas o viajes de don Quijote y Sancho es la siguiente: - Primera salida: capítulos I-VI de la primera parte. - Segunda salida: capítulos VII-LII de la primera parte. - Tercera salida: la segunda parte completa (capítulos I-LXXIV). DON QUIJOTE DE LA MANCHA: ESTUDIO DE LA OBRA (I) 2 1.-ESTRUCTURA DE LA NOVELA La novela fue publicada en dos partes y se estructura en torno a tres salidas de Don Quijote que se realizan a La Mancha, Aragón y Cataluña. La primera parte de la obra fue publicada en 1605, y la segunda apareció en 1615, poco antes de la muerte del autor. Un año antes, en 1614, apareció en Tarragona una falsa continuación del Quijote, conocida como El Quijote de Avellaneda. La primera parte de la novela comprende las dos primeras salidas. La primera, la más corta, abarca los seis primeros capítulos de la obra y en ella el hidalgo manchego vaga sin rumbo, como los caballeros andantes, por los caminos de La Mancha, se hace armar caballero, busca aventuras y vuelve a su casa maltrecho y apaleado. La segunda salida comprende todo el resto de la primera parte. Aparece aquí un elemento nuevo y fundamental en la novela, el escudero Sancho, que acompaña a su amo y va a servirle de confidente. Al final, don Quijote, engañado por sus amigos –cura, barbero, etc.- es conducido a su casa. En la segunda parte de la novela asistimos a la tercera y última salida de don Quijote y Sancho. Nuevas aventuras, las más importantes y extensas de ellas ocurren en la corte de unos duques. Otro amigo y convencido del protagonista, el bachiller Sansón Carrasco, sale en su busca y, tras intentarlo dos veces, logra conducir a don Quijote a su aldea. La novela acaba con la muerte de Alonso Quijano, momentos después de recobrar la razón. Primera parte: Esta primera parte tiene un prólogo dialogado –el autor habla con “un amigo gracioso y entendido”- en el que se burla de los escritores que publicaban sus libros precedidos de citas eruditas y de desmesurados elogios. Además., expone con claridad la finalidad de su novela y los medios estéticos que ha utilizado para lograr un libro ameno y provechoso. Cervantes escribe que el Quijote “es una invectiva contra los libros de caballerías” y que lleva “la mira puesta a derribar la máquina mal fundada de estos caballerescos libros, aborrecidos de tantos y alabados de muchos más”. En el último capítulo de la segunda parte, insiste en que “no ha sido otro mi deseo que poner en aborrecimiento de los hombres las fingidas y disparatadas historias de los libros de caballería”. DON QUIJOTE DE LA MANCHA: ESTUDIO DE LA OBRA (I) 5 Segunda parte: Como ya se ha dicho, la segunda parte salió a la luz en 1615, diez años después de la primera parte, y cuando sus personajes eran ya muy populares. Por esto, un año antes, apareció en Tarragona un plagio conocido como el Quijote de Avellaneda. Era bastante frecuente que en aquella época alguien se apropiase de una obra de éxito para continuarla por su cuenta, plagiándola descaradamente. Una de las consecuencias de este plagio es que Cervantes alteró el itinerario de don Quijote que estaba anunciado al final de la primera parte. Se decía que el caballero iría a Zaragoza a luchar en unos torneos. Como el Quijote de Avellaneda sigue esta indicación, Cervantes altera la ruta de su Quijote para que se vea la diferencia entre la obra falsa y la auténtica. En el prólogo de esta segunda parte, Cervantes reacciona vivamente contra el libro de Avellaneda y sobre todo frente a los insultos personales: “lo que no he podido dejar de sentir es que me note de viejo y manco”. Con fina ironía, Cervantes critica a Avellaneda, a su libro y a un famoso escritor: Lope de Vega. Además nos advierte que esta segunda parte ”es cortada del mismo artífice y del mesmo paño que la primera”. c) Tercera salida Esta tercera y última salida se extiende durante toda la segunda parte de la obra, y comienza un mes después del regreso del caballero de su segunda salida. Antes de realizar su tercer viaje, parece que el hidalgo manchego ha recuperado el uso de la razón y se comporta con toda la corrección posible, excepto cuando se toca el tema de la caballería, que lo transforma de nuevo en don Quijote. DON QUIJOTE DE LA MANCHA: ESTUDIO DE LA OBRA (I) 6 En esta tercera salida el engaño va a ser continuo, y es engañado por casi todos, incluido Sancho. Y esto es posible porque muchos personajes conocen los acontecimientos de la primera parte del Quijote. La acción de la segunda parte está condicionada por este hecho. La primera parte se convierte en un elemento novelesco de la segunda. Don Quijote sigue siendo el eje estructural del relato, pero pierde la iniciativa y son los otros personajes los que utilizan a don Quijote. Todo esto hace que don Quijote pierda su ilusión y empuje. La tristeza y la melancolía se apoderan de él. Muchas veces no es más que un espectador de lo que está sucediendo pero, en cambio, se muestra más reflexivo y profundo que antes. Sancho también ha evolucionado: ha aumentado su protagonismo y va tomando confianza en sí mismo porque sabe que sus aventuras están impresas en una historia. El diálogo que ya era un elemento muy importante, se convierte ahora en fundamental. Su dominio es casi absoluto. Las largas conversaciones entre caballero y escudero ocupan gran parte del libro. También son significativos los diálogos en los que intervienen otros personajes: los duques, Sansón Carrasco, etc. Uno de los elementos nuevos de la obra en esta tercera salida es que, de repente, aparecen otros caballeros andantes, por tanto, seres tan anacrónicos como el propio don Quijote. Nos encontramos con el caballero de los Espejos o del Bosque, y el caballero de la Blanca Luna, tipos reales, que retan a don Quijote y se comportan con todo el rigor de las leyes de caballería. En ambos casos se trata del bachiller Sansón Carrasco, vecino del mismo pueblo de don Quijote, que utiliza estas estratagemas para devolver al hidalgo a su casa. En esta parte aparece el curioso fenómeno de la literatura dentro de la literatura. Cuando don Quijote y Sancho salen por tercera vez son personajes conocidos por otros protagonistas de esta segunda parte que han leído la primera parte del libro y tienen noticia de sus locuras y aventuras. Una parte importante de esta salida transcurre cuando don Quijote y Sancho Panza pasan por tierras de Aragón y son acogidos por unos duques ricos y poderosos (cap. XXX-LVII) que han leído la primera parte del Quijote, los conocen y los invitan con la intención de pasar un buen rato con sus disparatadas locuras. Para ello convierten a Sancho en gobernador de la ínsula Barataria. Otro elemento nuevo en esta tercera salida es la entrada de la historia contemporánea de Cervantes en la novela. Lo hace con personajes y situaciones DON QUIJOTE DE LA MANCHA: ESTUDIO DE LA OBRA (I) 7 reales. Es el caso del bandolero catalán Perot Rocaguinarda (en la obra se llama Roque Guinart) que le sirve a Cervantes para que su pareja de protagonistas pueda entrar segura en Barcelona. También en Barcelona se narran hechos históricos reales, como la escaramuza naval en la que participa el propio don Quijote. También hay que destacar el conocimiento que tiene Cervantes de los problemas políticos y sociales de Cataluña a principios del siglo XVII. Este buen conocimiento concuerda con el gran elogio que se hace de Barcelona en el Quijote. “archivo de la cortesía, albergue de los extranjeros, hospital de los pobres, patria de los valientes, venganza de los ofendidos y correspondencia grata de firmes amistades, y en sitio y en belleza única”. También es en las playas de Barcelona donde don Quijote es vencido por Sansón Carrasco, disfrazado de caballero de la Blanca Luna que le impone como obligación volver a su aldea. 2.- EL LENGUAJE Y LOS PROTAGONISTAS El ideal lingüístico de Cervantes se cifró en el uso del idioma moderno, tal como lo hablaban los cortesanos cultos: palabras habituales (sin latinismos, arcaísmos o rusticismos), organizadas en frases sencillas. He aquí lo que le recomienda en el prólogo del Quijote, un amigo “gracioso y bien entendido”: “…procurar que a la llana, con palabras significantes, honestas y bien colocadas, salga vuestra oración y período sonoro y festivo, dando a entender vuestros conceptos sin intrincarlos y oscurecerlos”. Y es que, por entonces (1605) los escritores intrincaban ya y oscurecían sus conceptos: el movimiento Barroco estaba triunfando. Cervantes continuaba firme en su concepción renacentista de una lengua simple, natural y transparente, aunque compatible con una armonía sutil y trabajada. La prosa de Cervantes se distingue por su precisión y elegante belleza; una prosa del Renacimiento tardío, sencilla y armoniosa. Uno de los aciertos más reconocidos del estilo del Quijote es la gracia y el ingenio del diálogo. El diálogo entra a formar parte fundamental en la estructura de la novela a partir de la aparición de Sancho en la misma. Este diálogo muchas veces no es coloquial, sino artificioso, es decir literario. Cada dialogante “discursea” y manifiesta su punto de vista sobre un tema concreto. Este tipo de diálogo responde a una larga tradición literaria que arranca en la antigua Grecia (Diálogos de Platón). DON QUIJOTE DE LA MANCHA - ESTUDIO DE LA OBRA ( II) 1. Principales diferencias entre la primera parte y la segunda de El Quijote En la segunda parte de la novela, aparecen unos aspectos nuevos con relación a la primera parte. Uno de estos elementos nuevos es que aparecen otros caballeros andantes, por tanto, personajes tan anacrónicos como don Quijote. Hasta ahora no había salido ningún otro caballero en la novela ya que no había caballeros en los siglos XVI y XVII. En esta segunda parte nos encontramos con el caballero de los Espejos o del Bosque, y el caballero de la Blanca Luna, tipos reales, que retan a don Quijote a la lucha y se comportan con todo el rigor de las leyes de caballería. En cambos casos, se trata del bachiller Sansón Carrasco, vecino de don Quijote, que utiliza esta treta para devolver al hidalgo a su casa. En esta segunda parte aparece el curioso fenómeno de la literatura dentro de la literatura. Cuando don Quijote y Sancho salen por tercera vez son personajes conocidos por otros protagonistas de esta segunda parte que han leído la primera parte del libro y tienen noticia de sus locuras y aventuras. La acción de la segunda parte está condicionada por este hecho. Don Quijote sigue siendo el eje estructural del relato, pero pierde la iniciativa y son los otros personajes (Sancho, Duques, Sansón Carrasco) los que utilizan a don Quijote. Todo esto repercute en el protagonista: pierde su ilusión y su empuje. La tristeza y melancolía se apoderan de él. Se muestra más reflexivo y profundo que antes. El diálogo que era un elemento muy importante, ahora es fundamental. Las largas conversaciones entre caballero y escudero ocupan gran parte del libro. Otro elemento nuevo que aparece en la tercera salida es la entrada de la historia contemporánea de Cervantes en la novela. Lo hace con personajes y situaciones reales. Es el caso del bandolero catalán Perot Rocaquinarda (en la obra se llama Roque Guinart). También, en Barcelona, se narran hechos históricos reales, como la escaramuza naval en la que participa el propio don Quijote. Y por último, hay que señalar la continuidad en la acción principal. En la primera parte, la acción principal se interrumpe a menudo para dejar paso a narraciones intercaladas. En algún caso como en El curioso impertinente, la historia no tiene nada que ver con la acción principal. En cambio, las historias de Cardenio y Luscinda y de don Fernando y Dorotea sí se encuentran imbricadas en la acción principal. Todo esto responde a una costumbre literaria de la época, pues se consideraba que estas digresiones entretenían al lector. DON QUIJOTE DE LA MANCHA, ESTUDIO DE LA OBRA (II) 2 Estos cuentos intercalados fueron criticados como un desacierto de Cervantes, y así lo manifestaron sus contemporáneos. Por este motivo, en la segunda parte de El Quijote, Cervantes no deja nunca el hilo de la narración, ya no hay ninguna historia ni cuento intercalado. 2. La locura de Don Quijote Cervantes nos presenta a un personaje cuya característica principal es la pérdida de la razón debido a su desmesurada afición por la lectura de libros de caballería. Pero no mantiene el mismo grado de locura durante todo el relato. La locura de Don Quijote está basada en dos presupuestos falsos: 1.- Creer que todo lo que había leído en los libros de caballería era verdad histórica y fiel narración. 2.- Creer que en su época, principios siglo XVII, era posible resucitar la vida caballeresca de antaño, tal como se describía en los libros de caballería, y mantener los ideales medievales de justicia y equidad. Don Quijote sólo desvaría en aquello que se refiere a su obsesión y es perfectamente cuerdo en las demás circunstancias. Esta situación es fundamental en la novela, pues permite que don Quijote sea un personaje complejo, lleno de matices, que va alternando su locura y su cordura según el momento. Y no en pocas ocasiones encontramos una mezcla de las dos cualidades: es lo que se ha llamado la “locura entreverada” de don Quijote. En la aventura de los batanes no actúa como un caballero andante y se nos va descubriendo como un personaje contradictorio y humano. En la aventura del yelmo de Mambrino, recupera su papel caballeresco, pero en la de los galeotes su manera de actuar es mucho más ambigua. Ya en Sierra Morena, don Quijote sabe que va a hacer el loco (la penitencia) y explica muy razonadamente a Sancho cómo ha idealizado a Dulcinea. La estructura se complica: el caballero no responde siempre a un mismo comportamiento sino que va evolucionando a lo largo de la novela. También en el episodio de Sierra Morena aparece un nuevo elemento: por primera vez don Quijote es engañado por otros personajes (el cura, el barbero, Dorotea) con una ficción caballeresca (la princesa Micomicona). En los primeros capítulos de la segunda parte, antes de iniciar su segunda salida, parece que el buen hidalgo ha recuperado el uso de la razón y se comporta con toda la corrección posible, excepto cuando se toca el tema de la caballería que lo transforma de nuevo en don Quijote. Pero hay una diferencia con respecto a la locura de la primera parte. Antes, don Quijote confundía los molinos con gigantes y los rebaños de ovejas con ejércitos. Ahora, en cambio, su locura ya no le DON QUIJOTE DE LA MANCHA, ESTUDIO DE LA OBRA (II) 3 transforma la realidad: es la realidad, en todo caso, la que se ha vuelto loca y multiplica, fuera del tiempo histórica a los caballeros. De manera parecida sucede con el engaño de Sancho respecto a Dulcinea. Cuando amo y sirviente, el día que comienzan la tercera salida, van al Toboso para ver a Dulcinea, Sancho para salir del embrollo en que se encuentra, presenta a tres campesinas que vienen de camino a caballo de unos asnos como si se trataran de la princesa Dulcinea y sus dos damas de honor. El pobre Quijote ya no confunde la realidad y ve sólo lo que hay “Yo no veo, Sancho,… sino a tres labradoras sobre tres borricos”. Los encantamientos de la primera parte ya no cuentan. La única locura es la del ideal caballeresco, y a la realidad se la ve tal como es. 3. Sancho Panza La más importante novedad de la segunda salida es la presencia de un nuevo personaje, Sancho Panza, que se va a convertir en el perfecto acompañante de don Quijote. A partir de ahora, el procedimiento fundamental de la novela va a ser el casi constante diálogo entre don Quijote y su escudero. A través de él se penetra a fondo en el mundo de estos personajes y se establece un eficaz contraste entre la locura idealizadora del caballero, y la sensatez elemental del criado (entre el modo de ser y de estar del caballero y del escudero). Sancho Panza, a diferencia de su señor, es un hombre realista y práctico que lo seguirá fielmente a pesar de que no entiende sus idealismos. Mientras Don Quijote se dedica a deshacer imaginarios entuertos en su camino; Sancho, sencillo y bonachón, tratará de disuadirle para que no se meta en complicaciones. Sancho Panza es un campesino, vecino de Alonso Quijano. Rudo, elemental, de baja estatura, vulgar, comilón pero fiel a su señor. Ésta es la imagen que se tiene de Sancho Panza, pero a lo largo de la obra pasa de ser un buen hombre, un tanto simple, a la extraordinaria figura realista, llena de gracia e ingenio, que se va construyendo poco a poco. A lo largo de la historia, Sancho se va amoldando a su señor y se va pareciendo más a él, se va contagiando del ingenio y locura de su amo. Sancho está cambiando hacia un tipo de hombre más fino, algo que también se ve en su lenguaje, pues siempre está llamando a don Quijote “Vuestra merced”, y parece que de alguna manera Sancho está adoptando características más suaves y nobles. Es lo que se ha llamado la “quijotización” de Sancho. Uno de los aciertos más reconocidos en El Quijote es la viveza del diálogo entre el hidalgo y su escudero. Cada uno de los personajes habla con un lenguaje
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