"insomnio" Dámaso Alonso, Ejercicios de Lengua y Literatura

¡Descarga "insomnio" Dámaso Alonso y más Ejercicios en PDF de Lengua y Literatura solo en Docsity! Dámaso Alonso (1898-1990) Pocos años después del final de la Guerra Civil y en plena Segunda Guerra Mundial, el poeta dirige una protesta contra “la estéril injusticia del mundo y la total desilusión de ser hombre”. Actividades del poema “Insomnio”, Hijos de la ira (1944) 1. Breve exposición: «Tercera etapa del grupo del 27. Después de la guerra. Exilio y España». Con la Guerra Civil española muere Federico García Lorca (1936) y los miembros de la Generación del 27, a excepción de Vicente Aleixandre, Dámaso Alonso y Gerardo Diego, parten para un largo exilio separando el grupo de autores. Y a pesar de que prosigan su camino por individual, todos a la par empiezan a hacer una poesía más humana. En el exilio, Jorge Guillén, destacado poeta ‘puro’, inicia un nuevo rumbo poético en 1950 (marcado por las discrepancias del mundo y el dolor del hombre) con su obra Clamor. Entretanto, Alberti, Cernuda y Salinas (también en el exilio) despuntan por su poesía centrada en la nostalgia de la patria perdida. En España la poesía también deriva hacia un humanismo angustiado y existencial, como se puede discernir en la obra de Dámaso Alonso Hijos de la ira (a la qual pertenece el poema Insomnio) o en la obra de Vicente Aleixandre Historia del corazón, donde Aleixandre escribe una poesía más sencilla y accesible y se solidariza con la vida del hombre común, sus sufrimientos e ilusiones. 2. Tema y estructura del texto. ¿Qué línea poética representa? ● Tema: Alonso denuncia los daños y perjuicios de la guerra sin sentido desatada en España. Insomne, exterioriza su angustia, su desazón y su anhelo de respuestas interpelando a Dios sobre el sentido de la vida y la propia existencia. ● Estructura: el texto se divide en tres partes: ○ 1ª Parte (vv. 1-9): El poeta denuncia los estragos de la guerra al comparar la ciudad madrileña con un gran cementerio. Según el autor, la guerra ha dejado hombres muertos en vida que solo sienten odio y rabia, sentimientos que pudren y destruyen el alma. Parece desear la muerte, parangonando su cama con un nicho en el que se revuelve y expresando su falta de vitalidad: ‘Y paso largas horas gimiendo como el huracán, ladrando como un perro enfurecido [...]’. ○ 2ª Parte (vv. 10-15): Ante esta situación recurre a la única fuerza suprema que puede darle sentido a tanto dolor y sufrimiento: Dios. Alonso le recrimina su propia existencia y le pregunta sinceramente si toda esa ruinosa y arrolladora situación tiene algún sentido. A pesar de sus reproches, lo que la voz poética verdadera e inconscientemente intenta es buscar un atisbo de certidumbre y esperanza entre el inmenso caos, expresando su necesidad de creer y aferrarse a un Dios que le ayude a salir de todo aquello, aunque este parezca impasible.