¡Descarga La poesía de 1930-1939 y más Apuntes en PDF de Lengua y Literatura solo en Docsity! Prof.: Olivia Navarro Martínez Lengua Castellana y Literatura II – 2º BACH C/D IES Aguadulce. Curso 2020-2021 TEMA 2. LA LÍRICA DESDE 1900 A 1939. MOVIMIENTOS, AUTORES Y OBRAS MÁS REPRESENTATIVAS. 1. Contexto histórico y cultural. Con el desastre del 98 comienza un periodo convulso que tendrá su reflejo en el ámbito de la literatura. Durante estas tres décadas se suceden hechos tales como el reinado de Alfonso XIII, la dictadura de Primo de Rivera, la proclamación de la II República con el consecuente exilio del monarca y la Guerra Civil provocada por el golpe de estado de Franco. Paralelamente a todo esto se desarrollan los movimientos literarios que comentaremos a continuación. 2. La poesía desde el Modernismo a las Vanguardias: Futurismo, Ultraísmo, Surrealismo. En nuestro país el Modernismo da comienzo con la corriente procedente desde Hispanoamérica. Dicho movimiento es fruto de la crisis espiritual del siglo anterior y se divide en dos etapas: una con culto a la forma y otra con una poesía más profunda. Destacan en ella la voluntad de innovación, el individualismo, el cosmopolitismo, la evasión en el espacio y en el tiempo, los símbolos de elegancia, la riqueza léxica y su gran renovación métrica. Su principal exponente será Rubén Darío con obras como Azul, Prosas profanas y Cantos de vida y esperanza. Este movimiento en España no tendrá un desarrollo propio, ya que solo aportará la eliminación de la ornamentación y tenderá a una mayor profundidad influida por el intimismo de Bécquer. La base del Modernismo español se sustentará en la expresión de emociones íntimas y dolor de los recuerdos. El tema del tiempo transmitirá su emoción a través del sueño, el recuerdo o el diálogo con símbolos del mismo. Otro tema capital será el amor a través del recuerdo, con un estilo descriptivo y musical. En su métrica predominará la silva y el romance. Sus principales representantes serán Juan Ramón Jiménez con su poesía sensitiva hasta 1917 (Almas de violeta, Ninfeas, La soledad sonora y Sonetos espirituales) y Antonio Machado. Las obras más destacadas de este último son Soledades y Soledades. Galerías. Otros poemas. Por su especial inquietud será pronto cuando Antonio Machado abandone esta corriente para insertarse en la poesía del 98 que estará marcada por la preocupación social por el pueblo castellano. Sus temas principales serán el paisaje (Castilla), los hombres y la historia, vistos de forma objetiva y desgarrada, pero insertos en el tiempo: ayer poderoso, hoy miserable, mañana de esperanza. Abundan las meditaciones sobre la soledad, la muerte, el tiempo y Dios. Su poesía es breve y sentenciosa. Esta será su época más productiva con obras como Campos de Castilla (1912-1917) y Nuevas canciones. Una vez abandonado el Modernismo, Juan Ramón Jiménez iniciará su segunda etapa con la llamada “poesía intelectual”, una poesía desnuda, pura, dirigida a la minoría y acorde con los postulados del Novecentismo. Predominarán en ella la sencillez de estilo y los elementos vanguardistas (Diario de un poeta recién casado y Eternidades). A partir de 1936 entrará en la “poesía suficiente o verdadera”, que se caracteriza por ser cada vez más difícil, ya que solo le interesa la esencia del poema. El poeta busca a Dios en la naturaleza y se funde con él, abandonando las formas tradicionales, ya que el verso se transforma casi en prosa, con abundantes imágenes (Animal de fondo y Dios deseado y deseante). En cuanto a las Vanguardias, tuvieron una efímera trayectoria en nuestro país corrientes como el Futurismo (Marinetti), que exaltaba la civilización mecánica y la técnica, el Cubismo (Apollinaire), que descompone la realidad, juega con la tipografía, imágenes visuales y caligramas y el Dadaísmo (Tzara), que expresaba rebeldía pura a través de un lenguaje incoherente. Mención aparte merece por su origen y carácter español, el Ultraísmo (Guillermo de la Torre), con elementos futuristas y cubistas a través de imágenes tipográficas, temas deportivos y maquinistas y el Creacionismo (Vicente Huidobro y Gerardo Diego), un arte que no imita la realidad, sino que la crea utilizando un juego de azar de las palabras. Por último, el Surrealismo (André Bretón y Juan Larrea) será la vanguardia más influyente y en nuestro país se expresará de forma más humanizada. Supone la liberación total del individuo mediante la liberación del lenguaje con la escritura automática o el collage.
