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El Imperialismo Europeo en África y Asia: Causas, Consecuencias y Efectos en el Mundo, Resúmenes de Historia del Mundo Contemporáneo

Este documento analiza el proceso de expansión territorial de europa, estados unidos y japón en asia y áfrica, que llevó a la ocupación de gran parte de estos continentes y la aniquilación de muchas culturas y formas tradicionales. Las causas del imperialismo, como el crecimiento de la población europea y el papel de las sociedades geográficas, y describe los distintos tipos de colonias que se establecieron en áfrica. Además, se examina el imperialismo en china y japón, y se analiza la guerra del opio y la guerra sino-japonesa. Finalmente, se discute el papel de estados unidos en el imperialismo, con especial énfasis en la guerra hispano-americana y la construcción del canal de panamá.

Tipo: Resúmenes

2023/2024

Subido el 28/02/2024

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¡Descarga El Imperialismo Europeo en África y Asia: Causas, Consecuencias y Efectos en el Mundo y más Resúmenes en PDF de Historia del Mundo Contemporáneo solo en Docsity! 5. El imperialismo y la expansión colonial. A lo largo del siglo XIX, y sobre todo a finales, Europa -y Estados Unidos y Japón en menor medida- inician un proceso de expansión territorial que les lleva a ocupar gran parte de Asia y casi toda África. Las causas de ésta son evidentes, la segunda revolución industrial ha triunfado en esas potencias (con la excepción de Rusia) y se necesitan materias primas baratas, mano de obra casi esclava y lugares donde colocar los excedentes de productos y capitales. Como podemos deducir es la burguesía la principal beneficiada. Sin embargo, estos argumentos casi no aparecen ante la opinión pública, en su lugar una exaltación patriótica (nacionalismo) que toca la fibra sensible de la gente hace que todos los ciudadanos cierren filas en esos proyectos nacionales. La consecuencia más evidente de todo esto es la rivalidad entre los países europeos, y estas tensiones llevarán, en parte a la I Guerra Mundial. Por otro lado, el dominio europeo hace que la cultura occidental se asiente en gran parte del mundo contribuyendo a lo que hoy llamamos globalización al aniquilar gran cantidad de culturas y formas tradicionales. Que el fenómeno no se circunscribe a Europa se demuestra con la sutil dominación económica sobre algunos territorios por parte de Japón y EE.UU. que también han realizado su revolución industrial. 1. El imperialismo del siglo XIX. En el último cuarto del siglo XIX se inició un proceso de dominio político, militar y económico de grandes territorios de Asia y África por parte de países industrializados de Europa, EE.UU. y Japón. Este fenómeno se conoce como imperialismo, frente al denominado colonialismo, desarrollado en los siglos anteriores, en el que, con la excepción del Imperio español de América, predominaba el intercambio de mercancías sin que se mostraran ambiciones territoriales. Durante sesenta años, a partir de 1815, no hubo importantes rivalidades coloniales, en cambio, desde 1880, las cuestiones coloniales se situaron de nuevo en primer plano y las potencias industriales emprendieron una carrera de ocupaciones territoriales. Este proceso culminó, a principios del siglo XX, con la colonización del continente africano y de una parte del asiático. A lo largo de este proceso hubo Página | 2 momentos de fuerte tensión entre las potencias colonialistas, constituyendo una de las causas del estallido de la Primera Guerra Mundial. 2. Las causas del imperialismo. Son muchas las causas que influyen en el surgimiento de este fenómeno de expansión territorial, citaremos las más importantes: a) Causas económicas. El desarrollo de la industria europea y su necesidad de hallar nuevos mercados y materias primas. En efecto, el desarrollo de la segunda revolución industrial impulsó a los países más industrializados a buscar nuevos mercados donde situar los excedentes de su producción y, también, lugares donde obtener materias primas (algodón, caucho…) al mejor precio posible. A su vez, las colonias eran un lugar donde se podían invertir los capitales excedentes de la producción industrial. b) Causas políticas y militares. La superioridad militar de los europeos les facilitó una rápida ocupación territorial. La exaltación del nacionalismo, el “orgullo nacional”, obligaba a contar con colonias, donde los militares hacían méritos y conseguían ascensos y medallas. El imperialismo, por tanto, se veía como un signo de prestigio y poder de los Estados. Por otra parte, existían motivos estratégicos que hacían que una potencia se apoderase de un territorio clave para el control de las rutas comerciales o para impedir el acceso a una zona por parte de otro Estado. c) Causas demográficas. El vertiginoso crecimiento de la población europea (aumenta en unos 150 millones de personas entre 1870 y 1914) animó a la búsqueda de mejores posibilidades Las causas del imperialismo o expansión colonial. Página | 5 de Berlín, donde las potencias europeas llegaron a unos acuerdos para repartirse el continente africano. Se decidió la libre navegación por los ríos Congo y Níger y la libertad de comercio en África central entre el Atlántico y el Índico. También se acordó que sólo la ocupación efectiva, y no el descubrimiento previo, daba derecho a considerar un territorio como colonia propia, lo que dio lugar a una auténtica carrera colonial para conquistar África. Por último, para evitar tensiones entre las potencias europeas por el control del África central, se decidió crear el llamado “Estado Libre del Congo” como propiedad de Leopoldo II de Bélgica (1865-1909), que a su muerte legó a Bélgica. Alemania pudo ocupar Tanganica, Camerún y África del Suroeste. En el siglo XX, el káiser Guillermo II consideró este lote insuficiente, pero sus planes para acrecentarlo sólo tuvieron como resultado aumentar la tensión precursora de la Primera Guerra Mundial. Italia obtuvo Somalia y Libia; aspiraba a Túnez pero Francia se le adelantó. También, su intento de conquistar Abisinia terminó en un gran fracaso: la derrota de Adua (1896). En la conferencia de Berlín ya se planteó el problema de los “imperios coloniales continuos”, con la formación de ejes coloniales en sentido horizontal (dirección Oeste- Este) o vertical (dirección Norte- Sur). Francia aspiraba a crear un eje O-E desde Los imperios coloniales europeos en África en 1914. Los distintos conflictos entre las potencias coloniales. Página | 6 Senegal y Gabón por el Sáhara y Sudán hasta Somalia. Portugal deseaba igualmente conseguir su eje O-E entre Angola y Mozambique. Ambos ejes horizontales chocaban con el pretendido por Gran Bretaña en sentido N-S, entre El Cairo y El Cabo. La primera rivalidad colonial se produjo entre Inglaterra y Portugal en el África austral al querer Portugal unir Angola con Mozambique incorporándose el territorio entre ambas y que desembocó en la crisis del ultimátum o del “mapa rosa” (1890), por la que Portugal, una vez recibido el ultimátum británico, decidió desistir de su proyecto. La segunda rivalidad tuvo lugar entre Francia y Gran Bretaña en 1898 al chocar ambos imperialismos en Sudán (en Fashoda, a orillas del río Nilo) y que puso a ambas potencias al borde de la guerra. Francia terminó cediendo a las presiones inglesas renunciando a su imperio colonial en sentido Oeste-Este. Cuando parecía que se habían resuelto las tensiones coloniales, otra vez volvía la rivalidad, ahora entre Francia y Alemania, como consecuencia del intento de Francia de establecer un protectorado en Marruecos, en el que participaría España asignándosele la parte norte de Marruecos (el Rif). Alemania se opuso, ahora pretendía una mayor presencia colonial en África. Consiguió que estallaran dos crisis por Marruecos con la consiguiente tensión, contribuyendo a caldear el ambiente que desembocó en el estallido de la Primera Guerra Mundial. b) La colonización de Asia Oriental, Meridional y del Sureste. La expansión europea en Asia se desarrolló paralelamente al reparto de África. India y sureste de Asia. Francia actuó con éxito en Indochina. En 1858-1860, durante el Imperio de Napoleón III, ocupó la Cochinchina (región meridional de Vietnam=delta del Mekong con su capital Saigón). Tras enfrentarse a China (1884-1885) y salir ésta derrotada ello le permitió ampliar su presencia creando la Unión Indochina (1887), formada por Cochinchina y los territorios de Annam, Tonkin, Camboya y, más adelante, Laos. En la India la presencia británica era una realidad desde finales del siglo XVIII. En el siglo XIX la Imperios coloniales en Asia. Página | 7 administración inglesa se acentúa, sobre todo tras la revuelta de los cipayos (indios que formaban parte del ejército británico) en 1857-1859. Los ingleses practicaron una política de aislamiento de la India frente a otros imperialismos. Así, para contrarrestar la hegemonía francesa en el sudeste de Asia, Inglaterra procedió a la anexión de Birmania y de la extremidad sur de la península de Malaca, convirtiendo a Singapur en uno de los puertos más importantes del Extremo Oriente. En otra dirección, frente al Imperio ruso, que estaba extendiéndose por tierras del Asia Central, ocupando todo el Turquestán, Gran Bretaña consideró que sus intereses en Persia y la India podían verse afectados; al final, los dos Imperios (ruso y británico) permitieron que Afganistán cumpliera el papel de Estado-tapón, independiente, para separar a ambos Imperios. Por último, los holandeses que, a principios del siglo XIX, ocupaban poco más que la isla de Java, afirmaron su administración sobre las Indias Orientales Holandesas (Java, Sumatra, Borneo y parte de las islas Célebes) totalmente ocupadas en 1882. El Imperio ruso en Asia. El Imperio ruso ya había ocupado el Asia septentrional -Siberia- desde el siglo XVII. Al tratarse de un imperio continental, rodeado de hielo, su política expansiva consistía en avanzar hacia el sur, empujar por tierra contra el Imperio turco, contra Persia, contra la India y contra China. Ya hemos visto su presencia en Asia Central. Ahora corresponde tratar sobre su empuje sobre la China septentrional y en la costa del Pacífico buscando una salida en aguas más cálidas. Así, en 1858, se hizo ceder por China la provincia de Amur y, en 1860, obtuvo la región costera entre la desembocadura del río Amur y Corea. Allí se fundó el puerto de Vladivostok, presionando todavía más sobre China para que le cediera la Manchuria (China septentrional) para establecer el ferrocarril en esta región; además, el gobierno chino terminó entregándole también Port Arthur. El imperialismo en China. Los historiadores chinos denominan a la época en que se desarrollaban los distintos imperialismos como “época de los tratados desiguales”. China venía mostrando un carácter cerrado y autosuficiente. Los europeos la habían visitado desde la Edad Media, pero los chinos se resistían a relacionarse con los “barbaros” del Oeste y del Sur. Sin embargo, a mediados del siglo XIX, el aislamiento chino estaba llegando a su fin. La Caricatura alegórica al reparto de China entre los principales mandatarios europeos y Japón.
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