¡Descarga Interacciones Comunicativas entre Seres Vivos: Tipos, Comportamientos y Efectos - Prof. So y más Resúmenes en PDF de Periodismo solo en Docsity! Tema 2: La interacción comunicativa entre los seres vivos. Por Manuel Martín Serrano Lorena García Sierra 1º B, Periodismo RESUMEN Existen dos formas de interacción: la comunicación y la coactuación. La comunicación es una forma de comportamiento que requiere actos expresivos y que afecta al menos a dos seres vivos. Ambas formas son distintas y, es posible, que en algunos casos los actores las sustituyan. No obstante, en la comunicación también pueden darse actos ejecutivos por lo que ambas formas de interacción tienen un punto común. Existen tres tipos de comportamientos: autónomos, heterónomos y opcionales. El primero es aquel comportamiento en el que el objetivo que tiene un ser vivo lo consigue por él mismo. Destacan todas las actividades llevadas a cabo por el sistema nervioso autónomo; El segundo es aquel en el que el objetivo de un ser vivo lo consigue ayudado por otro ser vivo. Este último tiene que hacer de agente, paciente o ambas cosas con respecto al primero. Destacan las actividades encaminadas a la reproducción, a las necesidades alimenticias o a la división del trabajo. La acción comunicativa pertenece a este tipo; El tercero es aquel en el que el objetivo de un ser vivo puede conseguirse con la ayuda de otro o sin su ayuda, por lo que, dependiendo de lo que elija, se convertirá en autónomo o heterónomo. Los tipos de comportamientos van a determinar una secuencia de actos: expresivos y ejecutivos. Los expresivos usan energía para producir señales que logren la interacción entre seres vivos y una vez cumplidos pueden no conseguir los efectos que se querían. Son ineficaces sin los actos ejecutivos. Dentro hay dos subtipos: los expresivos que se pueden sustituir por los ejecutivos (el comportamiento alcanzaría su objetivo) y los que no se pueden sustituir (el comportamiento no alcanzaría su objetivo). Cuando se quiere conseguir un objetivo abstracto, son necesarios estos actos; Los ejecutivos usan una gran cantidad de energía destinada a cambiar un objeto y logran siempre los efectos que se desean. Conseguir un objetivo va a depender siempre de ellos. Destacamos dos subtipos: los actos ejecutivos que se pueden sustituir por los expresivos (el comportamiento alcanzaría su objetivo) y los que no se pueden sustituir (el comportamiento no alcanzaría su objetivo). Cuando el objetivo implique la modificación de cualquier objeto, se requieren estos actos. Los comportamientos autónomos requieren actos ejecutivos pero nada le impide que puedan usar también los expresivos. Si participa otro ser vivo, el comportamiento autónomo va a dar lugar a otro heterónomo con actos ejecutivos. Esto se llamará pseudoejecución. Los comportamientos heterónomos requieren sólo actos ejecutivos, sólo actos expresivos o ambos actos. Este análisis permite diferenciar entre las prácticas viables y las inviables. La comunicación se muestra como una clase de actos de comportamiento que sustituyen a los actos ejecutivos unas veces en condiciones de viabilidad y otras de inviabilidad. Estas condiciones son: que Ego complique a Alter para el logro del objetivo, y que los actos ejecutivos a los que sustituyen las expresiones no sean necesarios para llevar a cabo el fin. La comunicación no se distingue de la coactuación por sus objetivos sino por sus procedimientos. A nivel de estos últimos, la distinción entre las dos primeras se establece por su distinto grado de riesgo. El riesgo de que la comunicación sea ineficaz para alcanzar los objetivos de un ser vivo surge de diferentes causas: las expresiones que Ego utiliza pueden no ser comprendidas o captadas por el Actor. Por esto el hombre no está en condiciones de captar la longitud de onda de los sonidos y puede pasar de la advertencia comunicativa a la acción agresiva, por lo que, a nivel biológico, la comunicación se muestra como una alternativa a la agresión; y el Actor con el que se comunica puede captar las señales y comprenderlas pero de forma liberal puede no satisfacerlas. La combinación entre actos expresivos y ejecutivos para lograr el mismo objetivo puede efectuarse de dos modos: el modo acrónico se da cuando la secuencia del comportamiento de las manifestaciones expresivas siguen a los actos ejecutivos (o al revés), pero ambos actos no se dan a la vez; el modo sincrónico es lo más normal para que se den la
