Docsity
Docsity

Prepara tus exámenes
Prepara tus exámenes

Prepara tus exámenes y mejora tus resultados gracias a la gran cantidad de recursos disponibles en Docsity


Consigue puntos base para descargar
Consigue puntos base para descargar

Gana puntos ayudando a otros estudiantes o consíguelos activando un Plan Premium


Orientación Universidad
Orientación Universidad

Resumen y características Poema de Gilgamesh, Ejercicios de Historia de Oriente Próximo

Resumen y características Poema de Gilgamesh

Tipo: Ejercicios

2020/2021

Subido el 14/02/2021

RosaGarcia
RosaGarcia 🇪🇸

5

(3)

5 documentos

Vista previa parcial del texto

¡Descarga Resumen y características Poema de Gilgamesh y más Ejercicios en PDF de Historia de Oriente Próximo solo en Docsity! POEMA DE GILGAMESH TABLILLA I Versión Asiria - ​La primera tablilla nos presenta a Gilgamesh, un tercio humano y dos tercios divino; hijo de Lugalbanda y Rimat-Ninsum, diosa secundaria patrona de los bóvidos salvajes, y cuyo cuerpo fue modelado por Makh, diosa madre creadora de la humanidad, y rematado por Nudimmud, también conocido como Enki, tercera gran divinidad cósmica mesopotámica. A Gilgamesh se le fue concedido sabiduría y fuerza inigualable, y al igual que su padre, fue rey de Uruk, la cual amuralló. De gran estatura y figura esbelta, no había hombre que le hiciera frente, su tiranía no tenía límites y se aferraba a su derecho de pernada. Las gentes, cansadas de este comportamiento opresivo, imploran a Anu, padre de los dioses, quien se dirige a Aruru, diosa madre, instándole a crear a un ser parecido a Gilgamesh, capaz de hacerle frente y acabar con su tiranía. Aruru entonces concibió a Enkidu, al cual modeló con arcilla en la estepa, Este era velludo, no vestía prenda alguna y su fuerza era comparable con la de Gilgamesh. Habitaba la estepa junto a su manada y, un día tras otro se tropezaba con el mismo cazador, al cual impedía ejercer su oficio. Dicho cazador fue a quejarse a su padre y tras él a Gilgamesh quien le entrega a la hieródula Shámkaht que, con sus atributos, seducirá a Enkidu haciéndole olvidar su manada. Una vez terminado el acto, Enkidu intenta acercarse a los animales, alejándose estos espantados. Shámkaht entonces le habló de la ciudad de Uruk y de la fuerza de Gilgamesh, proponiéndole ir a retarlo. Por otro lado, Gilgamesh tiene un sueño que le advierte de la llegada de Enkidu como un paladín de Anu, al cual intenta levantar y al final posa sobre los piés de su madre, quien lo trata como si fuera su propio hijo. Entonces su madre le avisa de que no es un enemigo el enviado, sino un amigo con sus mismas cualidades, un protector. Fragmento hitita - ​Esta versión nos presenta el poema con un carácter hímnico. Gilgamesh es presentado como creación de los dioses a su imagen y semejanza, y cómo cada uno le otorga una facultad. Es descrito como un ser colosal, con una altura de 5 metros y medio, y tirano, que oprimía la ciudad de Uruk. Entonces, la diosa madre creó a un ser semejante a él. TABLILLA II Versión Paleobabilónica - ​Esta tablilla comienza con los sueños de Gilgamesh, en uno de ellos un cuerpo celeste cae del cielo pero no tiene fuerzas para moverlo. Junto a los jóvenes que se aglutinan a su alrededor, consiguen mover este cuerpo celeste hasta su madre; en el segundo sueño aparece un hacha vieja y oxidada a la cual Gilgamesh trata como si fuera una mujer, llegando a yacer con ella. A esto su madre le responde que el primero es un hombre como él, pero nacido en la estepa y criado con los animales; y en el segundo, el hacha simboliza al hombre y el amor que siente hacia él; teniendo así su explicación. Enkidu, mientras, cohabita con Shámkaht, la cual, momentos después, le tapa con uno de sus vestidos y juntos se dirigen a una pequeña cabaña de pastores. Estos pastores le ofrecieron pan y cerveza, pero este lo rechazo puesto que no sabía comer ni beber. La hierodula le indicará que coma, puesto que es necesario para vivir, y que beba, puesto que es la costumbre del país, y habiendo dicho esto, éste bebió y comió. Tras asearse y armarse acabó con los lobos y leones que desolaban los rebaños de los pastores, pudiendo dormir estos en paz. Entonces se celebra un festín, de una boda por lo deducido, y durante la fiesta, divisa a un hombre que, tras adelantarse, indica que ha sido invitado a la casa de los esponsales para asistir a la costumbre de escoger novia. Este a su vez, le habla sobre Gilgamesh y su derecho de pernada, cosa que hace colerizar a Enkidu. Entonces Enkidu se dirigió acompañado de Shámkaht a Uruk con el fin de hacer frente la tiranía de Gilgamesh. Una vez ahí, la gente lo rodeó y comparó con Gilgamesh, diciendo que era más bajo y vigoroso que este último, y celebraron una fiesta en su honor. Se había dispuesto un lecho para la diosa Ishkhara donde yacería Gilgamesh con la novia. Cuando se dirigía hacia allí, Enkidu le corta el paso y se disponen a pelear. Gilgamesh, a pesar de su fuerza y destreza es abatido por Enkidu. Versión Asiria - ​En los fragmentos encontrados de esta versión será la hieródula quien inste a Enkidu a ir hacia Uruk. Una vez ahí, da pruebas de su fuerza y, cuando se encuentra con Gilgamesh le corta el paso, apiñándose el pueblo a su alrededor. Para éste, como ya hemos enunciado, se había preparado un lecho, pero en esta versión el susodicho porta un cinturón, clásico ornamento destinado al novio para la noche de bodas. Entonces empiezan a pelear, tras lo cual Rimat-Ninsun describe las cualidades de Enkidu y le reprocha a Gilgamesh su Rosa María García Roldán comportamiento. Le hace ver a éste último lo desdichado que ha sido el primero, tras lo que ambos se abrazan y Enkidu llama amigo a Gilgamesh. Fragmento babilónico - ​Durante su estancia con los pastores, estos resaltan la similitud respecto a la estatura entre Gilgamesh y Enkidu. Fragmento acadio - ​En este fragmento se hace referencia a la estatura de Enkidu, siendo más pequeña que la de Gilgamesh. Por otro lado, aquí la hieródula le dice a Enkidu que coma pan, pues es propiedad de los dioses y que beba cerveza, pues es propiedad de los reyes. Fragmento hitita I - ​Breve fragmento en el que se alude simplemente al derecho de pernada y a la cólera de Enkidu. TABLILLA III Versión paleobabilónica - ​Siendo ya amigos mantienen una conversación en el que uno le muestra sus pesares mientras el otro intenta animarlo con sus proyectos, Enkidu se sentía atormentado, quizás por su nuevo tipo de vida. Entonces Gilgamesh se dirigió a su hermano y le habló del Bosque de los Cedros y de su feroz guardián Khuwawa, entonces éste le advierte del peligro que acarrea tal encomienda puesto que conoce a ese ser y se lo describe. Ambos comienzan a debatir sobre el tema, concluyendo Gilgamesh con esta discusión, anuncia a Enkidu que partirá al bosque y se enfrentará a Khuwawa para ganarse un nombre y junto a él ira su hermano. Dicho esto, ambos se dirigen hacia la fragua donde encargan un arsenal de azuelas, hachas y machetes de gran peso y tamaño. Antes de su partida, las gentes del pueblo se juntan en la plaza para despedirse y desearles buena fortuna, mientras, Gilgamesh habla con los ancianos en busca de bendición y consejo, estos le indica que junto a él vaya Enkidu y que sea él quien lo guíe y lo proteja puesto que conoce el camino, aunque Enkidu sigue advirtiendo del peligro. A su vez, le aconsejan que cabe un pozo y ofrezca libaciones de agua al dios Shamash y a Lugalbanda. Entonces Gilgamesh implora a Shamash que le proteja y le guíe en su partida. Versión asiria - ​Gilgamesh le propone a Enkidu la aventura del Bosque de los Cedros, donde habita Khumbaba, guardián del lugar, destinado a ello por Enlil, dios del viento y la tierra. Nuevamente Gilgamesh le propone ir en busca de ese ser, agarrándose a la idea de que si han sido puestos en este mundo es por algo; pese a que Enkidu se niega, éste afirma que irán. Pedirán consejo a los ancianos y partirán hacia Egalmakh, morada de Ninsum, diosa madre, para que implore a Shamash que los bendiga. Entonces Ninsum marcha a su aposento donde se lava y cambia, y tras esto, acude a la terraza y una vez ahí hace humear incienso ante Shamash implorando que lo vele en su viaje. Esta acción la repite dos veces y hace llamar a Enkidu, a quien confía la vida de su hijo. Finaliza con los ancianos encomendando a Enkidu la protección de Gilgamesh pese a las advertencias del primero. Fragmento neobabilónico - ​Enkidu le describe a Gilgamesh la dificultad conlleva adentrarse en el Bosque de los Cedros, entonces Gilgamesh le hace consciente de su grandeza y su fuerza, y ambos parten a los mentalistas. El fragmento continúa retomando la charla sobre los peligros del camino y finaliza con los ancianos infravalorando a Gilgamesh Fragmento babilónico tardío - ​Este fragmento se divide en dos momentos, los mentalistas debatiendo sobre qué tipo de armas han de forjar; y un discurso de Gilgamesh dirigiéndose al pueblo. En él anuncia que volverá para la fiesta Akitu, por otro lado, Enkidu muestra su desaprobación ante los ancianos y les pide que hablen con Gilgamesh puesto que ningún hombre puede sobrevivir a tal aventura. TABLILLA IV Versión asiria - ​Ambos recorren alrededor de 350 kilómetros en un día, al tercero alcanzan la montaña donde Gilgamesh cava el pozo que le habían aconsejado los ancianos, y en la cima, hace una ofrenda de harina tostada a Shamash con el fin de que éste le revele en sueños un mensaje favorable. Entonces Enkidu prepara Rosa María García Roldán Shamash, al oír tales palabras, le pregunta el por qué de esas maldiciones ya que fué el cazador quien le llevó a la hieródula, y ésta a su vez la que le dio de comer y beber y le vistió, además de presentarle a su fiel compañero Gilgamesh. Enkidu reflexionó y rectificó, procurándole bendiciones a Shamkhat. El texto continúa con Enkidu contándole un segundo sueño a Gilgamesh. En él un ser temeroso, con un rostro parecido al de Anzu, zarpas de león y garras de águila (posible demonio Asakku), que lo apresaba y golpeaba mientras imploraba ayuda a su amigo, pero éste no acudía por su temor. Más tarde ese ser lo arrastraba al infierno, a la Casa de las tinieblas, el Irkalla (descrito como una gran ciudad rodeada por siete muros y puertas a la cual había de llegar despojado de toda prenda, no sin antes haber pasado por el juicio de los Anunnaki; tras la sentencia, el difunto era incorporado en el Irkalla sin posibilidad de retorno). Allí escuchó los lamentos de antiguos monarcas, obispos, exorcistas… Continúa narrando su bajada al infierno mientras Gilgamesh intenta interpretar su significado, e implora a éste que lo recuerde. La enfermedad de Enkidu se agrava hasta el duodécimo día. Con un último esfuerzo se incorpora en la cama y al no ver a Gilgamesh junto a él, lo llama y reclama lanzando preguntas al aire mientras su último aliento expira. Texto babilónico - ​Repetición del texto asirio, continúa resumiendo parte de la enfermedad y muerte de Enkidu. Éste, ya en su lecho de muerte y delirante, se dirige a Enlil intentando justificar sus actos, alegando que no fue él quién taló los cedros ni quién cavó un pozo en su montaña. Esta charla hace despertar a Gilgamesh, al cual le cuenta el sueño que ha tenido. Enkidu acaba comprendiendo que no tiene salvación y al cuarto día muere; Gilgamesh, roto por el dolor, rasga sus ropajes mientras grita. TABLILLA VIII Versión asiria - ​Desde el amanecer, Gilgamesh llora la muerte de su amigo al que le dirige una serie de palabras y lamentos ante el cadáver del mismo. Desolado, manifiesta su dolor ante los ancianos y narra las hazañas realizadas por ambos. Cubre el rostro de su amigo con un velo y comienza a dar vueltas alrededor de su cadáver mientras se arranca mechones de pelo y rasga sus ropas. Al amanecer del día siguiente hace llamar a todos los artesanos de Uruk a quienes les encomienda elaborar una estatua votiva de oro, lapislázuli y obsidiana en honor a su difunto compañero. El texto continúa con una posible descripción de la estatua. Podríamos interpretar que esta serie de lamentos y cultos hacia Enkidu hizo entristecer a Shamash por lo enunciado. Al alba, Gilgamesh hace sacar una mesa y realiza una serie de ofrendas funerarias a Shamash en honor de Enkidu, una copa de cornalina llena de miel y otra de lapislázuli llena de mantequilla, posible rito taklimtu. El texto finaliza haciendo alusión a la descomposición del cadáver y a la estatua funeraria de Enkidu. TABLILLA IX Versión asiria - ​Gilgamesh vaga por la estepa, donde un día nació Enkidu, sollozando y temeroso de correr el mismo destino que su amigo, e implora a Sin, dios luna y señor del saber, y a Ishtar, pese a haberla humillado. Tras un mal sueño, pone rumbo a Mashu, míticas montañas que delimitan el mundo y por donde sale y entra Shamash cada día, en busca de Utnapishtim, quien había alcanzado la inmortalidad por haber salvado a la humanidad del Diluvio universal, con el fin de que le revele el secreto de la misma. En su travesía acaba con todo tipo de animales, de entre ellos dos leones. Allí, una pareja de hombres-escorpión, hombre y mujer, custodian la entrada y salida de Shamash y, al ver a Gilgamesh, comienzan a hablar entre ellos sobre la divinidad del mismo. El hombre-escorpión, dirigiéndose a Gilgamesh, le pregunta el motivo de su viaje y comienzan una charla en la que el primero anima al segundo a que continúe su nueva misión. Tras esto, toma el camino de Shamash a través de la montaña. Después de haber andado ocho dobles leguas comenzó a gritar de desesperación, al cabo de nueve notó el Viento del Norte, y al cabo de doce dobles leguas se encontraba en el Jardín de los dioses, cuyos árboles dan pedrería como fruto. Texto hitita - ​Recoge la marcha de Gilgamesh tras el funeral de Enkidu. Hace alusión a los sacrificios realizados por Gilgamesh en honor a Shamash. Rosa María García Roldán TABLILLA X Versión asiria - ​Gilgamesh llega a orillas del océano donde habita Siduri, la tabernera divina, la cual atemorizada al verlo, cierra la puerta de su establecimiento. Gilgamesh amenaza a Siduri con romper la puerta y acto seguido se presenta, pero la tabernera le cuestiona si realmente es él dado el deterioro que éste presenta. Gilgamesh continúa relatando el motivo de su viaje y la pérdida de su amigo y cómo desde entonces la pena y el hastío le ha invadido. Acto seguido le pregunta a la divina Siduri el camino hacia su antepasado Utnapishtim, a lo que ésta le responde que ningún hombre es capaz de cruzar las Aguas de la Muerte sin perecer en su intento pero que, aun así se presente ante el barquero Urshanabi, al cual protegen “los de piedra” (estatuas apotropaicas, protectoras de la barca frente a demonios y espíritus malignos del agua, las cuales actúan a modo de pértiga, impidiendo que las manos del barquero toquen el agua). Gilgamesh arremete contra el barquero, al cual golpea en la cabeza, y destruye a “los de piedra”, ignoramos el por qué de esta acción. Urshanabi, dirigiéndose a Gilgamesh, le hace las mismas preguntas que le había hecho Siduri antes de aconsejarle hablar con el barquero, y ambos mantienen un diálogo similar. Gilgamesh pregunta a Urshanabi el camino hacia su antepasado, a lo que éste le responde que sin “los de piedra” no es posible emprender tal recorrido, por lo que manda a Gilgamesh fabricar 120 pértigas de 30 metros de longitud. Una vez hecho esto, ambos embarcan y recorren en tres días la distancia de un mes y medio hasta quedarse sin pértigas. Gilgamesh entonces, se deshace de sus ropajes y los despliega a modo de vela mientras reflexiona como ído sobre “los de piedra” y el hombre que lo acompaña. Ya en tierra Gilgamesh relata nuevamente el motivo de su viaje pero esta vez a Utnapishtim. Éste le contesta que por qué prolongar su angustia con la vida eterna; los dioses asignaron la muerte a los humanos. Continúa con una serie de alegorías respecto a la muerte. Versión paleobabilónica - ​Comienza con un diálogo entre Shamash y Gilgamesh. Shamash le indica que la inmortalidad no está destinada a los humanos, pero Gilgamesh no se muestra conforme. El texto continúa una vez en la taberna, donde Gilgamesh le narra su sufrimiento a la tabernera. Ésta, a su vez, le responde lo mismo que anteriormente le dijo Shamash. Pero Gilgamesh implora que le indique el camino haci Utnapishtim, advirtiéndole Siduri de los peligros que acarrea. Salta a la escena del barquero. Gilgamesh lleno de rabia arremete contra los “hombres de piedra” y se presenta a Urshanabi, a quien ordena que lo guíe hasta Utnapishtim. Éste le indica que deberá cortar 300 pértigas de 60 metros puesto que ha acabado con sus transportadores. Texto hitita I - ​Narra la llegada de Gilgamesh a la taberna divina de Siduri, identificada a menudo como una forma de Isthar. Por otro lado, Sin ordena a Gilgamesh que, con los dos leones que había matado, haga dos trofeos y los lleve a la ciudad. Texto hitita II - ​Llegada de Gilgamesh a la orilla del mar. La segunda parte alude al camino que debe tomar. Texto hitita III - ​Recoge parte del diálogo de Gilgamesh con el barquero. Aquí, los “hombres de piedra” han sido reemplazados por dos imágenes de piedra. TABLILLA XI Versión asiria - ​Gilgamesh se disponía a atacar a Utnapishtim pero al verlo como a un igual, sin ningún aspecto destacable, le pide que le cuente cómo consiguió la inmortalidad, éste accede a contarle el secreto de los dioses. Todo comenzó en Shuruppak, una ciudad a orillas del Eufrates. Los dioses habían celebrado consejo (Anu, Enlil, Ninurta, Ennugi y Nishshiku-Ea) en el cual se acuerda suscitar un diluvio en la mencionada ciudad y se le indica a Utnapishtim que renuncie a todas sus posesiones y construya un barco cuyas dimensiones correspondan entre ellas. Ea a su vez le indica que deberá decirle a su pueblo que descenderá al Apsu para vivir junto a él, y que sobre ellos lloverá panes y trigo (aquí hallamos un juego de palabras: ​kukku​, traducido como pan o tinieblas; y ​kibati​, trigo o desdicha, podría ser un engaño del dios). Rosa María García Roldán Enunció las palabras transmitidas por Ea a sus súbditos y éstos comenzaron a aportar materiales para la construcción y a ayudar en su fabricación. Tras su finalización al quinto día, celebran una fiesta por todo lo alto y embarcan las posesiones y familiares de Utnapishtim, además de animales domésticos y salvajes y artesanos. Shamash, al día siguiente, anuncia el inicio del Diluvio, tal fue el horror que provocó que hasta los mismos dioses se espantaron. Duró seis días y siete noches, hasta que el mar se calmó y el barco quedó varado en el monte Nisir. Utnapishtim continúa explicando cómo subió a la cima de éste monte y allí dispuso 14 vasijas oferentes con plantas odoríferas para los dioses, que acudieron de inmediato, de entre ellos Makh. Llamó a todos menos a Enlil, causante del Diluvio, que, como habría de esperar, apareció y al ver el barco, entró en cólera contra los Igigi (dioses acadios, contrapartida de los Anunnaki). Ea, a su vez, le reprocha su acción ofreciéndole otras opciones. Tras esto, Enlil hizo subir a Utnapishtim y a su mujer al barco, y tocándoles la frente les concede la vida eterna. Utnapishtim, habiendo acabado su relato, aconseja a Gilgamesh que intente no dormir durante una semana con el fin de ver si es apto para recibir la inmortalidad, como un rito de paso. Gilgamesh acepta pero una vez se hubo sentado, el sueño lo envolvió. La mujer de Utnapishtim cocina un pan que deja junto a Gilgamesh por cada día que duerme, siete fueron en total. Utnapishtim, al séptimo día, despierta a Gilgamesh que, confundido, piensa que solo ha dormido unas pocas horas hasta que se dá cuenta de la evidencia debido al mal estado de los panes. Utnapishtim nuevamente aconseja a Gilgamesh, esta vez le indica que se lave y se mantenga impoluto en su camino de vuelta a Uruk, y así hizo. Antes de partir Utnapishtim revela a Gilgamesh el paradero de una planta que, pese a no dar la vida eterna, concede vitalidad. Tras coger la planta embarca junto a Urshanabi rumbo a Uruk. Durante una parada en una fuente para que Gilgamesh se lavase una serpiente le roba la planta, al percatarse se lamenta. Finalmente llegan a Uruk donde Gilgamesh anima a Urshanabi a que sube a la muralla y contemple su majestuosidad. TABLILLA XII Versión asiria y texto sumerio - ​Los primeros 26 versos hacen alusión a la creación y reparto del universo. Existía un árbol, el khuluppu, plantado a orillas del Eufrates, el viento del sur lo arrancó y las aguas del río lo arrastraron. Inanna lo encontró y lo plantó en su jardín divino en Uruk. Una vez hubo crecido, Inanna pretende fabricar un trono y un lecho con su madera pero se encuentra con que una serpiente, un pájaro y Lilith habían anidado en su interior. Pide ayuda a Gilgamesh, quien mata a la serpiente y hace huir a los otros dos. Inanna le manda fabricar para sí un ​mikku, ​tambor, y un ​pukku, ​palo del tambor. No se sabe cómo tambor y palo caen al infierno y Gilgamesh se lamenta. Aquí hace su aparición Enkidu, quizás como ente, el cual ofrece a Gilgamesh bajar en busca de su instrumento, a lo que éste le da una serie de instrucciones que ha de seguir si quiere salir de ahí. Pero Enkidu no sigue las indicaciones y es capturado. Gilgamesh implora ayuda a los dioses, primero a Enlil, pero éste no le ayudó, luego a Sin, quien no le contestó, y por último a Ea. Éste último le indica que hable con Nergal, el cual abre un acceso al infierno por donde sale el espectro de Enkidu. Enkidu y Gilgamesh inician una charla sobre las condiciones de las personas en el infierno. VALORACIÓN PERSONAL El Poema de Gilgamesh es uno de los mayores ejemplos de la mentalidad mesopotámica. Los temas que se desarrollan son múltiples, como el amor, la amistad, la vida y la muerte, la búsqueda de la gloria y de la inmortalidad, la muerte por el castigo de los dioses, el hastío existencial, el miedo a ser olvidado, el espíritu de aventura o la resignación ante el destino. Se trata de un texto épico, de carácter narrativo, escrito en tercera persona y de autoría anónima que transcurre de forma lineal. Su estructura gramatical y semántica es paralelística y divide el poema en hemistiquios. Tiene como protagonista a Gilgamesh rey de Uruk, hijo del antiguo monarca Lugalbanda y la diosa Ninsun. Es presentado como un monarca déspota y tirano al cual los dioses envían a Enkidu, mitad animal mitad humano con el fin de acabar con él, pero acaban forjando una amistad. Rosa María García Roldán
Docsity logo



Copyright © 2024 Ladybird Srl - Via Leonardo da Vinci 16, 10126, Torino, Italy - VAT 10816460017 - All rights reserved