Resumenes Ciencia Politica (Capitulo II Dossier tema 3), Resúmenes de Criminología

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 PODER, LEGITIMIDAD Y ESTADO El concepto de poder con el propio concepto de estado, al menos desde la perspectiva de ver si es posible enlazar el concepto de poder a través del Estado de una manera democrática. En un primer momento nos referimos cuando hablamos de poder y a que nos referimos cuando hablamos de poder vinculado al Estado, hablar del poder es hablar de la energía natural que mueve las sociedades. Lo que mueve a la sociedad, lo que hace que las sociedades funcionen, esa energía que enchufa, que crea las sociedades y también a ser el gran catalizador que regula esa energía dentro de la sociedad. El poder no tiene sentido sin el concepto de violencia. Thomas Hobbes lo que nos dice es que sin la existencia de un poder institucionalizado en el Estado no es posible encauzar la violencia primaria que aparece en cualquier tipo de sociedad, viene a decir algo como que la violencia entre personas sin Estado, lo que llama “estado de naturaleza” que crea el caos. Si Hobbes señala que hay un concepto básico para el mundo de la política ese es el concepto de poder, tenemos que reflexionar sobre el poder y sobre la violencia, la violencia por tanto es inescapable. En la propia definición de Estado en Max Weber, este es el que ejerce el monopolio de la violencia física, lo cual viene a significar que toda la violencia social se absorbe en una institución que es la que después la ejerce. Hobbes incorpora la idea de legitimad en dos sentidos: 1o el Estado solo podrá ser legitimo si cumple el fin para el que existe y si es capaz de garantizar un orden y en 2o lugar, utiliza un concepto de legitimidad para referirse a aquellos que se la otorgan, y aquí es donde esta la radical modernidad de Hobbes que consiste en señalar que la legitimidad es producto del consentimiento de los individuos. La legitimidad nace de un supuesto contrato social entre los individuos que son los que transfieren su derecho a la propia defensa a esta entidad superior que el denomina el Leviatán. En Hobbes encontramos la primera teoría de la legitimidad moderna, porque hasta entonces el poder era algo que no tenia que justificarse, era algo que venia dado ya en la propia sociedad. La primera conclusión que podemos extraer es que el problema del orden es el problema fundamental de la política, sencillamente porque sin orden no existe más que violencia. El estado esta obligado a respetar los derechos de los individuos, algo que obsesionaba a Hobbes era precisamente la guerra civil, no olvidemos que vive una época de guerras civiles en la Inglaterra del XVII, la legitimidad democrática es posible porque el tema del orden no era ya el tema fundamental, el tema político básico son los excesos del Estado a la hora de imponer el orden. Por lo cual cambian absolutamente las condiciones. La esencia de la teoría hobbesiana describe perfectamente bien lo que es el funcionamiento del poder en toda organización humana y este concepto hobesiano después va a tener una enorme influencia en autores como Freud y en autores mas contemporáneos como el propio Facoult, que es quien mas ha trabajado sobre el poder en la segunda mitad del siglo XX. Lo que nos dice Hobbes es que los seres humanos somos una especia de autómatas que nos guiamos por la búsqueda de satisfacciones primarias. Hay un movimiento primario en todo ser humano que le obliga a velar por su subsistencia física, por mantenerse vivo. Es una especie de maquina que funciona siempre evitando el dolor y teniendo a la satisfacción del placer, de los deseos. Trata de imaginar una sociedad donde no existe un mecanismo capaz de imponer su voluntad, de establecer la ley, de imponer un orden coercitivo. Para Hobbes la 1o inclinación de toda la humanidad es el perpetuo e incansable deseo de poder tras poder, (deseo que solo acaba con la muerte). El poder es el narcótico que nos permite calmar la ansiedad y es un narcótico tremendamente poderoso porque además no es imaginable entender un ser sin poder. Un sujeto sin poder carece de la propia concepción de subjetividad, idea que también asumirá después el mismo Freud. Es decir, que lo necesario es reprimir en nosotros todo ese tipo de conductas que nos mueven a intentar obtener todo lo que deseamos. Hobbes viene a decir que el hombre es apto para la sociedad, no por naturaleza sino por a través de la disciplina, aunque lo han introducido como educación, el termino latino que utiliza es disciplina. Incluso una vez que el hombre ha sido disciplinado, el hombre sigue aspirando al poder. En este caso Hobbes tiene alguna relación con el propio Nietzsche, pero para este el poder es mas bien un medio que nos permite realizar fines nobles: el poder para lo que sirve es para llegar a ser un hombre, mientras que para Hobbes el poder no es algo que sirva para ampliar nuestra alma sino para protegerla, deseamos poder porque deseamos estar protegidos. Resumiendo: el poder calma la ansiedad y el poder introduce un orden en el propio sujeto, pero ese orden nunca es completo si no existe un orden institucionalizado por fuera que garantice el orden para todos. El bien primario fundamental, diría Hobbes y aquel que tiene que ocuparse la política, es la seguridad. El problema en la teoría de Hobbes esta en que el leviatán no es solamente un constructo dirigido a absorber todo ese poder que en el estado de naturaleza poseían las diferentes personas, el que monopolizaba toda la violencia social, sino que esto es lo que siempre a llevado a la obra de Hobbes a ser sobre todo tendencia liberal, es un poder ilimitado, un poder no sujeto a ningún tipo de limites, carente absolutamente de constreñimientos. En el concepto de libertad de los súbditos de la que habla Hobbes, serán libres para realizar aquellas cosas que estén autorizados por el soberano. La presencia del Estado es muy superior, se trata de crear una unidad de poder de la que depende en exclusiva todo el ejercicio de la violencia institucionalizada sobre un territorio y bajo la cual están todos los súbditos en igualdad de condiciones. Hobbes piensa que al Estado hay que atribuirle dos grandes funciones, que son: velar porque no disminuya su poder soberano, por mantenerlo firme y unitario; esto es un autentico deber de todo Estado. Y en segundo lugar, garantizar la paz civil y el bienestar general del pueblo. Hobbes no esta pensando en crear un déspota, sino en crear un órgano que sea útil a toda sociedad y esa utilidad se mide por su capacidad para imponer un orden legal y de coacción. Hobbes afirma que toda persona racional optaría por la seguridad, sencillamente porque las condiciones contextuales en las que vivía Hobbes impedían otro tipo de salida. La violencia física es la mayor demostración del poder porque la violencia física mantiene viva la idea de la muerte. Afecta a la victima en el centro de su existencia, que es el cuerpo. Se ha dicho que en Hobbes no hay verdadera distinción o diferencia entre terror y derecho, o entre arbitrariedad y ley, o entre sistemas totalitarios y democráticos. De lo que se acusa a Hobbes es de que la autoridad por un lado debe limitar la violencia pero por otro de ascenderla a lo máximo hasta llevarla a una violencia de tipo institucionalizado.