Medea: Un relato de venganza y traición, Apuntes de Literatura

¡Descarga Medea: Un relato de venganza y traición y más Apuntes en PDF de Literatura solo en Docsity! La obra empieza con un monólogo de Medea lamentándose porque quiere la muerte de la nueva esposa de Jasón y el padre de está, pero que Jasón quede vivo para que sufra y que se vea solo, como un alma desamparada sin saber qué hacer. Medea quiere venganza y su fin es entrar en la boda de la pareja para realizar una catástrofe contra ellos ya que ha sufrido muchísimo. Después del monologo hace un canto al coro. En el acto segundo vuelve a hacer un monólogo que habla sobre lo desgraciada que es y lo mal que se siente por culpa de Jasón que la ha dejado abandona y sola. Se queja de que no tiene las fuerzas suficientes para planear su terrible venganza y culpa a Creonte de haber disuelto el matrimonio de ambos. La nodriza intenta relajarla pero esta dice que va a vengarse y luego huira lejos de la ciudad. Creonte horrorizado por lo que ha escuchado sobre Medea le concede el exilio, pero está no quiere irse sin vengarse. Medea y Jasón hablan sobre su nueva esposa y los nuevos hermanos que tendrán sus hijos frutos del matrimonio nuevo, él quiere que ella le perdone y estar en paz pero Medea quiere seguir con su venganza. Medea quiere llevar a cabo una brujería para su venganza y la nodriza oye esto terribles cantos y presiente que una gran catástrofe se avecina, la venganza de Medea esta por llegar y la nodriza no puede hacer nada para impedírselo. Finalmente el mensajero llega y comunica al coro que sin motivo alguno el palacio donde habitaba Jasón y su esposa ha ardido en llamas por un terrible fuego voraz y que la ciudad está en peligro, han intentado apagarlo pero con el agua las llamas se avivan y el fuego arde más rápido. La nodriza sabe que todo ha sido culpa de Medea y le aconseja que huya rápidamente. Medea le cuenta a Jasón que ya ha muerto su mujer y su suegro y este le pide que lo mate a él antes de ver a sus hijos muertos. Medea los mata y arroja sus cadáveres ante Jasón y desaparece por el cielo mientras deja a este sufriendo y lamentándose. Las escenas finales son diferentes porque en la versión de Seneca Medea no culpa a Jasón por la muerte de sus hijos, incluso mata a uno de sus hijos frente a Jasón y se culpa a sí misma por la muerte. En la versión de Eurípides, Medea hace lo contrario, porque culpa a Jasón y no siente culpa ni culpa por sus acciones.