¡Descarga El Franquismo: Ideologías, Oposición y Políticas (1939-1959) y más Apuntes en PDF de Historia de España solo en Docsity! TEMA 9. La creación del Estado franquista (1939-1959): 01 Fundamentos ideológicos, políticos y sociales del Régimen de Franco. 02 La oposición del exilio y la resistencia del interior. 03 La autarquía económica. 04 La política internacional. Fundamentos ideológicos, políticos y sociales del Régimen de Franco. La dictadura franquista (1936-1975) afianzó su poder mediante la implacable represión de los vencidos y el apoyo de los sectores más conservadores. Este se asentó sobre unos principios ideológicos elementales recogidos de la Falange, del carlismo, de la Iglesia y de la tradición conservadora española. Los principales elementos definitorios son; - nacionalismo español (que concebía la patria como una comunidad racial, lingüística, religiosa e histórico-cultural, asentada sobre un territorio y comprometida con una misión histórica, que el régimen definió con la confusa expresión «unidad de destino en lo universal».), - nacionalcatolicismo (expresión de la unión entre la Iglesia y el Estado, en virtud de la cual la defensa de la fe era parte de la esencia histórica de España. Por ello, los postulados católicos impregnaron la vida del país y la jerarquía eclesiástica se integró en las instituciones del Estado.), - imperialismo, según el cual España mantenía una «vocación de imperio» entendido como difusión de los principios espirituales del nacionalcatolicismo por el mundo. según el cual España mantenía una «vocación de imperio» entendido como difusión de los principios espirituales del nacionalcatolicismo por el mundo. - Anticomunismo y antiliberalismo (al entender que el comunismo estaba enfrentado con los valores cristianos, y que el liberalismo era una doctrina individualista importada y ajena a la tradición del país.). El franquismo constituyó un régimen político dictatorial que se institucionalizó a través de las Leyes Fundamentales del Reino, conjunto de siete leyes aprobadas entre 1938 y 1967. Este se configuró como un Estado: - Centralista, significó la supresión de cualquier forma de autonomía y la imposición de una única Administración y de la unidad lingüística. - Confesional, La religión católica era la oficial del Estado. - Social, el Estado intervenía para corregir desequilibrios frente al capitalismo liberal. - Tradicionalista. Pretendió enraizar con una determinada interpretación de la historia de España, especialmente con la imperial. La jefatura del Estado se vinculó con carácter vitalicio a la persona de Franco, quien ostentó el supremo poder político y asumió las jefaturas del Estado y del Gobierno, De este modo, las Cortes nunca fueron democráticas. El catolicismo se convirtió en la religión oficial del Estado, aprobada por el Concordato de 1953. Por otro lado, Un rígido centralismo anuló cualquier modelo de autonomía. El Fuero de los españoles contempló la existencia de derechos individuales, subordinados a los principios ideológicos del régimen. La política social se desarrolló en leyes y normas, relativas a temas como la protección familiar, seguros de vejez y enfermedad… El sistema político recibió el nombre de «democracia orgánica» en la Ley Orgánica del Estado (cerró el proceso de institucionalización del régimen). Los sindicatos de clase fueron prohibidos sustituidos por la Organización Sindical, formada por sindicatos verticales. El Movimiento Nacional actuó como partido único. Franco mantuvo su arraigo entre los grupos sociales que apoyaron a la España nacional en la Guerra Civil, la clase terrateniente y propietaria los pequeños y medianos agricultores, los militares, el clero y las clases medias urbanas, en general. la oposición del exilio y la resistencia del interior. Se impuso una estricta moral pública, que afectó a la familia, a la educación y a las costumbres. Además, se estableció una censura oficial y la enseñanza se reguló rígidamente con la separación de niños y niñas en aulas o centros diferentes, y con el estudio de una Historia propagadora de la idea imperial. Aumento el número de familias desestructuradas por la guerra y de vagabundos, y la proliferación de prácticas ilícitas, como timos, extorsiones, fraudes y tráfico de influencias. Hubo una dura represión, los fusilamientos alcanzaron cifras de entre 50 000 y 100 000 ejecutados. El número de desaparecidos se estima en unos 140 000 y los detenidos en casi 500 000, muchos de los cuales murieron en cárceles, campos de trabajo y campos de concentración. A estas cifras hay que añadir los muertos por hambre y enfermedades derivadas de la contienda y la posguerra. Los presos fueron utilizados como mano de obra forzada, destacamentos penales. Tras la guerra, la oposición apenas se dejó sentir. La guerrilla antifranquista, llevada adelante por los maquis que permanecieron emboscados en lugares poco accesibles, pero sin armas pesadas, por lo que, sus acciones no supusieron una verdadera amenaza. Al rededor de 450000 personas Marcharon al exilio, de las cuales cerca de 200000 nunca regresaron a España. La oposición, Una generación nueva formada por los tecnócratas del Opus Dei. El ministro de Educación a partir de 1951 promovió el regreso de algunos intelectuales exiliados y la renovación de la universidad. 5 años más tarde los estudiantes se manifestaron y se produjeron algunos incidentes callejeros. El ministro fue destituido y, aplicando medidas policiales, se puso fin a la protesta. Entretanto, se reorganizó la oposición en el exilio La autarquía económica. La posguerra (1939-1953) significó una etapa de carencias, Ante la escasez de alimento se impuso la cartilla de racionamiento. Este fue un documento de uso obligatorio empleado durante la posguerra para controlar el consumo de alimentos de primera necesidad. La población se hacinó en viviendas reducidas e insalubres y reaparecieron algunas epidemias. El transporte se vio afectado por la falta de gasolina. La sequía aumentó las penurias, al reducir las cosechas y limitar el suministro de electricidad y de agua a la población.
