¡Descarga Temas Ebau de geografía y más Apuntes en PDF de Geografía solo en Docsity! En general para todas las islas, la zona baja o de matorral costero es un área muy degradada por la actividad humana, ya que es la zona con mejores condiciones para la urbanización. Por este motivo, la vegetación natural ha sufrido un importante retroceso. Asimismo, esta franja costera rodea la isla de Tenerife, y va desde los 0 metros hasta un límite situado entre los 300 y los 500 metros sobre el nivel del mar. Esta marca altitudinal varía según se trate de la vertiente norte o sur de la Isla. La costa norte, al ser más accidentada y húmeda, provoca las condiciones para un menor desarrollo de la vegetación típica de la zona de costa, mientras que la vertiente sur, es menos accidentada y más seca, lo que presenta un desarrollo más amplio de la flora de este piso de vegetación hasta los 500 m. Otra comunidad presente en las zonas bajas o costeras es la halófila, compuesta por especies que viven en zonas muy cercanas al mar y en sustratos arenosos o rocosos. Al vivir en zonas afectadas por la maresía, tienen mecanismos de adaptación para soportar altos contenidos en sales, acumularlas por medio de melosidades o para expulsarlas mediante glándulas especiales. Uno de los lugares que presenta es el Médano. Según ascendemos sobre el nivel del mar, nos encontramos la zona de bosque termófilo, formado por especies arbóreas y arborescentes, constituyendo un piso de transición entre la zona costera y el piso montano. Además, este piso ha sido denominado sabinar-palmeral, por ser dos de las principales especies que lo componen, aunque aparecen siempre acompañadas por numerosas especies, tanto herbáceas como arbustivas. Esta zona ha sido de las más utilizadas tradicionalmente para la agricultura, por lo que la vegetación potencial ha sido roturada debido a su inaccesibilidad. En la zona de montaña de las islas más altas, es conveniente diferenciar entre la fachada húmeda y la seca, debida esta diferenciación a la influencia o no de los húmedos vientos alisios. Unos ejemplos son, las sabinas, la palmera canaria y el sauce. A partir de los 600 metros sobre el nivel del mar, en las zonas de barlovento de la isla, encontramos el Monteverde, que incluye la laurisilva y el fayal-brezal. En la isla de Tenerife este tipo de vegetación se encuentra bien representado. Asimismo, se desarrolla solo en las zonas más húmedas del norte y noreste de la isla, entre los 600 y 1.200 m de altura. A esta cota se instala el mar de nubes, aportando a la vegetación la ‘lluvia horizontal’, sin la cual no podría existir. Este bosque está compuesto por gran cantidad de especies de árboles, todos ellos de hojas perennes. Por ejemplo, la laurisilva es una de las formaciones arbóreas más conocidas de Canarias. Se caracteriza por ser una formación boscosa y densa, siempre verde y resguardada del sol. La formación de fayal-brezal aparece en la parte superior de la laurisilva, donde el mar de nubes comienza a remitir. Por ello, la insolación es mayor, eso nos indica que se trata de una formación más abierta, donde aparecen nuevas especies. Un ejemplo de laurisilva es el palo blanco y de fayal-brezal es la faya o el brezo.
