Docsity
Docsity

Prepara tus exámenes
Prepara tus exámenes

Prepara tus exámenes y mejora tus resultados gracias a la gran cantidad de recursos disponibles en Docsity


Consigue puntos base para descargar
Consigue puntos base para descargar

Gana puntos ayudando a otros estudiantes o consíguelos activando un Plan Premium


Orientación Universidad
Orientación Universidad

TORMENTO - PREGUNTAS PAU, Apuntes de Lengua y Literatura

La novela Tormento tiene como escenario la ciudad Madrid durante los meses finales de 1867 y los primeros de 1868, en el periodo que precedió al destronamiento de la reina Isabel II y el inicio del Sexenio democrático. Galdós narra en esta novela con un tono casi humorístico las desventuras de una joven huérfana. Amparo Sánchez Emperador, alias “Tormento”, que se encuentra asediada por la “pasión sacrílega” de un sacerdote sin vocación, Pedro Polo Cortés, y salvada por un indiano, Agustín...

Tipo: Apuntes

2020/2021

Subido el 08/03/2022

Nerejmk
Nerejmk 🇪🇸

4.8

(17)

6 documentos

Vista previa parcial del texto

¡Descarga TORMENTO - PREGUNTAS PAU y más Apuntes en PDF de Lengua y Literatura solo en Docsity! TORMENTO ARGUMENTO La novela Tormento tiene como escenario la ciudad Madrid durante los meses finales de 1867 y los primeros de 1868, en el periodo que precedió al destronamiento de la reina Isabel II y el inicio del Sexenio democrático. Galdós narra en esta novela con un tono casi humorístico las desventuras de una joven huérfana. Amparo Sánchez Emperador, alias “Tormento”, que se encuentra asediada por la “pasión sacrílega” de un sacerdote sin vocación, Pedro Polo Cortés, y salvada por un indiano, Agustín Caballero. El triángulo amoroso se complementa con la presencia de Rosalía Pipaón conocida como “la de Bringas” por ser esposa del modesto Francisco de Bringas, un conocido personaje de la burguesía madrileña de la época. Es Rosalía de Bringas intenta seducir al indiano Agustín para una de sus hijas perjudicando a Amparo. RASGOS REALISTAS Y NATURALISTAS DE TORMENTO EN CUANTO A REALISMO: Tormento se basa en unas determinadas tendencias filosóficas representativas en la época, como el positivismo, el marxismo y la teoría evolucionista. -Positivistas: solo otorgan validez científica a los datos comprobables por la experiencia; es decir todo lo que expresa teóricamente es contrastado con la realidad. Demostrando que existía un conflicto moral entre clases sociales. -Evolucionistas: explica el desarrollo de la humanidad y el resto de los seres vivos como un proceso de selección natural, a través del cual solo las especies más fuertes y que han sabido adaptarse a su medio, lograron sobrevivir. Esta tendencia la defiende el personaje de Agustín Caballero, un personaje que se ha forjado a si mismo con una abundante pobreza, es un superviviente que con su esfuerzo ha logrado conseguir una inmensa riqueza. Este personaje ve la sociedad de la época como un convencionalismo, del cual huye. -Marxistas: es la tendencia que menos abunda en la novela. Esta idea explica la historia de la humanidad desde el punto de vista exclusivamente económico, como el fruto de las diferentes condiciones de explotación laboral que sufrieron la mayor parte de los trabajadores a lo largo de la historia. Esta tendencia visualiza el dominio de una clase social sobre la otra y los personajes que la representan son Amparo, el frutero y el señor Felipe. Esta novela va dirigida a autores realistas interesados en el tema y en verse plasmados en las novelas; escribían para la burguesía. Las obras se vendían por entregas, y su propagación avanza acompañando el avance técnico de la época, como la fabricación de papel a máquina. Como consecuencia el aumento del público lector es considerable. NATURALISMO: En España no se dio el naturalismo como tal, fueron solo los rasgos básicos. El naturalismo fue una fase del realismo, como movimiento literario, que se aplicaba en ciertos aspectos de la obra; esta tendencia es representada en la obra por Pedro Polo (alcohólico, degenerado, posesivo). El naturalismo trata de aplicar a la novela procedimientos de ciencia experimental, como los siguientes: -El escritor observa minuciosamente y luego describe, con la imparcialidad científica, los diversos comportamientos humanos. Como los sentimientos y reacciones de Amparo. -El determinismo: la conducta de los personajes aparece condicionada por tres factores: el medio social, la herencia biológica y el momento histórica. -El acercamiento de los aspectos más duros de la realidad; algunos como el alcoholismo (Pedro Polo), discriminación social (Amparo)... son remarcados como caracteres negativos de las personas o de la sociedad. -La crítica social: presentando con detalle y objetividad una serie de “casos” o documentos humanos para corregir las injusticias sociales. CARACTERES DE LOS PRINCIPALES PERSONAJES MASCULINOS (PEDRO POLO, FRANCISCO DE BRINGAS Y AGUSTÍN CABALLERO), Y FEMENINOS (ROSALÍA PIPAÓN Y AMPARO) Hay un triángulo amoroso entre Amparo, Agustín y Pedro Polo. cobardía es, probablemente el más destacable de sus defectos, también el que más problemas trae. Es una mujer débil que, como bien elle dice, no puede elegir su vida, solo sirve para aceptarla como venga, lo cual no es más que una tonta disculpa. Su comportamiento trágico le aporta a la novela un aire clásico. Mantiene diversas relaciones con cada uno de los protagonistas. Tiene una actitud amorosa, pero tímida y acobardada con Agustín Caballero, siente adoración por él y le cree el hombre más bueno del mundo. Se lleva bien con Francisco de Bringas el cual, al contrario que su mujer, la trata como a una hija. Rosalía, siempre atenta a las clases sociales, cambia el trato de criada que le daba en un principio por el de condesa tras el compromiso. La relación con Pedro Polo es la más complicada, ya que a pesar de odiarle a menudo le trata con alegría y familiaridad. Rosalía Pipaón: El autor nos da una imagen muy clara del físico de Rosalía: es una pintura de Rubens, una mujer de blancas carnes curvadas, con facciones pequeñas y graciosas que la hacen muy hermosa, incluso después de los tres partos que ha sufrido y que no la han hecho perder su frescura. Su rasgo más particular es la forma en la que se ensancha su nariz cundo habla con orgullo. Rosalía Pipaón de la Barca es la esposa de Francisco de Bringas. Es noble, de la baja nobleza, pero noble, y una habitual del palacio real, eso la llena de orgullo. Lo más importante en su vida son las apariencias, ser una mujer importante y respetada en la sociedad madrileña. Es la antagonista de Amparo, trata a esta como su criada, excepto cuando deja de ser una pobre niña muerta de hambre. Es una persona ambiciosa y egoísta, no tiene inconvenientes en mentir y ser hipócrita para conseguir sus propósitos. Se podría decir que es el equivalente a la bruja de los cuentos infantiles. Sus relaciones con los demás personajes están sujetas casi exclusivamente a la posición social de estos. Por ejemplo, el trato cariñoso y complaciente que tiene con Agustín, el primo rico de su marido, la ambición de Rosalía la lleva a pensar en tomarle por marido una vez que muera el suyo, ya que su hija es demasiado joven para él.. Ya hemos hablado antes del trato con Tormento y como este cambia radicalmente, a pesar de que sigue sin respetarla lo más mínimo y desea su mal, ante ella se comporta con toda la simpatía del mundo. Rosalía no ve a las personas como tales, sino que ve un título, un vestido, una situación social... Es la representación de la burguesía hipócrita de la época, su función es, no solo la de antagonista, también la de ser el prototipo de aquello que la novela critica. LAS PRINCIPALES MODALIDADES NARRATIVAS Y LOS RESPECTIVOS PUNTOS DE VISTA: EL NARRADOR OMNISCIENTE, IDO DEL SAGRARIO Y EL MONÓLOGO INTERIOR. Narrador omnisciente. La novela aparece relatada a menudo por un narrador omnisciente, que conoce con detalle el presente, el pasado y es capaz, incluso, de anticipar el futuro de los personajes. Muestra los pensamientos más profundos de los personajes y no duda en dirigirse al lector para comentar sus comportamientos. “Estas frases podían ser dichas sin mala intención; pero a la joven le parecieron astutas y picarescas... lo que más le llamaba la atención era que la tal señora no estaba enojada; antes bien, de buen humor, casi gozosa.” “Cuando empezó a comer, Polo parecía el mismo de marras, con la diferencia del peor color y de la pérdida de carnes. Pero su espíritu discretamente jovial, su cortesía un poco seca, estilo castellano; su mirar expresivo y su apetito reproducían los amargos días pasados.” El autor conoce los pensamientos del personaje, y conoce su pasado y el estado de dicho. Estilo indirecto libre. El autor emplea con frecuencia el estilo indirecto libre. De esta manera, el lector puede asomarse al interior del protagonista novelesco y seguir el curso de sus reflexiones. “¡Otra carta! Amparo creyó que se caía de lo alto de una gran torre, al ver aborrecida la letra del sobre. Mirando y remirando su nombre, dudaba del testimonio de sus ojos. Padecía su espíritu tan raros trastornos, que fácil era sospechar que le daban pesadillas despiertas.” Minuciosas descripciones: El escritor refleja también con detalle el ambiente en el que desarrolla la acción. Abundan las minuciosas descripciones de calles, pueblos, costumbres, casas, habitaciones o incluso el vestuario y aspecto físico de los personajes. “Refugio, alzando los brazos, seguía consagrada con alma y vida a la obra de su pelo, que era lo mejor de su persona: una masa de dulce sombra que daba valor a su rostro tan blanco y diminuto. La falta de un diente en la encía superior era la nota desafinada de aquel rostro; pero aun este desentono dábale cierta gracia picante, parecida en otro orden de sensaciones, al estímulo de la pimienta en el paladar. Con burlesca vivacidad miraban sus ojos picaruelos, y su nariz, ligeramente chafada, tenía la fealdad más bonita y risueña que puede imaginarse...” Ido del Sagrario: Como ocurre con tantos otros personajes de las novelas de Galdós publicadas en la década de los ochenta, José Ido del Sagrario es un personaje recurrente que desempeña una función auxiliar en la imaginación novelesca. Más o menos sensato, más o menos chiflado, acompaña la deriva argumental apuntando lecturas folletinescas de la realidad. En Fortunata y Jacinta, donde ya aparece completamente trastornado, cumple la función de “dueño del secreto”. Previamente, en El doctor Centeno, Lo prohibido y Tormento, Ido desempeña diversos oficios siempre relacionados con la escritura y lo escrito (maestro de primeras letras, tenedor de libros, escritor de folletines o ayudante de un memorialista) y su grado de chifladura evoluciona desde la aparente sensatez hasta la paranoia con evidentes síntomas físicos. Menor atención ha prestado la crítica a la aparición de este personaje en la última serie, la quinta, de los Episodios Nacionales, donde Galdós trata de narrar la historia de España de las últimas décadas el XIX ensayando una prosa grotesca cercana al esperpento. Monólogo interior: En estas obras el autor ya no utiliza planteamientos religiosos o políticos para valorar las conductas de sus personajes. Lo que surge es un conjunto impresionante de mezquinos, bondadosos, burgueses adinerados, nobles arruinados, desheredados, grandezas y miserias de gentes que viven para aparentar. Galdós consigue captar esta pluralidad social y vital con técnicas narrativas nuevas sirviéndose tanto del monólogo interior, como del estilo indirecto o del personaje narrador. Amparo, en uno de sus monólogos interiores, tiene una actitud firme y decidida, pero a la vez triste, por lo que pasó, y asustada, por lo pueda pasar, además el uso abusivo de puntos suspensivos significa que las frases no están acabadas y por lo tanto, que continúan dando vueltas en su cabeza. En la última frase el monólogo se convierte en un diálogo con Dios, al cual le hace un ruego, es en esta parte donde se percibe su tremenda desesperación. “Ya no me llamo Tormento, ya recobro mi nombre -decía para sí, andando muy aprisa-. No volveré más, aunque se hunda el mundo. Procuraré no volver a ser débil; si, débil, porque esa es mi culpa mayor: ser buena y tener mucho miedo... Esto se acabó. Suceda lo que quiera, no le veré más... Pero si se irrita y me escribe cartas, y me persigue y descubre... ¡Señor, Señor, déjalo ir a esa isla de los antípodas, ¡o llévame a mí de este mundo!”
Docsity logo



Copyright © 2024 Ladybird Srl - Via Leonardo da Vinci 16, 10126, Torino, Italy - VAT 10816460017 - All rights reserved